Murió Hank Aaron; bateó la intolerancia

Hank Aaron, quien enfrentó amenazas racistas con estoica dignidad mientras se acercaba al récord de Babe Ruth y se convirtió en el rey de jonrones en la era previa al uso de esteroides, murió ayer. Tenía 86 años.

Los Bravos de Atlanta indicaron que Aaron falleció en paz mientras dormía. No se reveló la causa.

La última vez que se vio en público fue hace menos de dos semanas, cuando recibió la vacuna contra covid-19.

Hammerin’ Hank (El Martillo Hank) fijó varias marcas de bateo en sus 23 años en Grandes Ligas, la mayoría con los Bravos, incluyendo las que mantiene de remolcadas, hits de extrabases y bases totales.

Pero el miembro del Salón de la Fama será recordado sobre todo por un swing.

Fue un título que mantendría durante más de 33 años, un periodo en que afianzaba lenta pero firmemente su justo lugar como una de las figuras deportivas más icónicas de Estados Unidos, un verdadero tesoro nacional digno de ser mencionado junto con Ruth o Ali o Jordan.

El 8 de abril de 1974, con casa llena en el Atlanta Stadium y en un partido transmitido en todo Estados Unidos, Aaron quebró el récord histórico de Ruth al conectar su cuadrangular 715 ante el pitcher Al Downing, de los Dodgers.

Aaron terminó su carrera con 755 jonrones, un total que Barry Bonds superó en 2007, aunque muchos todavía consideran a Aaron como el verdadero rey de jonrones.

Bonds cerró su carrera con 762, aunque Aaron nunca le tuvo rencor por romper su récord.

Sólo traté de jugar este deporte de la forma que se supone que se juegue”, subrayó Aaron.

Su nombre aparece por todos lados en los récords del béisbol, y, de hecho, Hank Aaron podía hacer de todo. No se puede olvidar el promedio de .300, o la gracia con que patrullaba su posición en los jardines, o la sorprendente velocidad que exhibía al recorrer las bases.

Jamás vi a alguien conectar tantas líneas por todos lados”, señaló el excomisionado, Bud Selig, quien creció como fanático de Aaron y luego se convirtió en su amigo. “Qué carrera tan maravillosa”.

Aaron fue exaltado a Cooperstown en 1982 y se quedó corto por apenas nueve votos de ser el primer jugador elegido de forma unánime.

NOCHE MÁGICA. El toletero es felicitado por sus compañeros luego de superar el récord de Babe Ruth.

Henry Louis Aaron nació en Mobile, Alabama, el 5 de febrero de 1934, para sumarse a una larga lista de jugadores de esa ciudad — Satchel Paige, Willie McCovey, Billy Williams y Ozzie Smith, entre otros.

Siempre tuvo el recuerdo de aquella noche de abril en 1974.

Downing era un pitcher fino”, recordó Aaron en el 30 aniversario de su cuadrangular más famoso. “Creo que estaba tratando de lanzarme una screwball o algo así. Fuese lo que fuese, alcancé a conectarla”.

El camino que Aaron tuvo que recorrer hasta ese jonrón no fue nada agradable. El toletero recibió correspondencia ofensiva mientras se acercaba a los 714 de Ruth.

Si yo fuese blanco, Estados Unidos estaría orgulloso de mi”, dijo Aaron casi un año antes de superar a Ruth. “Pero soy negro”.

Aaron era siempre acompañado por guardaespaldas y se vio obligado a alejarse de sus compañeros. También guardó las cartas con insultos.

Eran muy ofensivas”, recordó. “Me decían ‘maldito negro’ y todo tipo de insultos. Esas cosas no se pueden ignorar, están allí. Pero así son las cosas para los negros en Estados Unidos. Es algo con lo que uno tiene que batallar toda la vida”.

Tras retirarse en 1976, Aaron se convirtió en una figura reverenciada y casi mítica, aunque nunca buscó los reflectores.

Se alegró cuando Estados Unidos eligió a su primer presidente negro, Barack Obama, en 2008, y el expresidente Bill Clinton señaló que Hank Aaron ayudó a forjar un ambiente de tolerancia racial que hizo posible el triunfo de Obama.

FUERA DE SERIE

INOLVIDABLE. El 8 de abril de 1974, el pelotero consiguió su jonrón 715 superando la marca establecida por el mítico Babe Ruth casi 40 años antes.

RECONOCIMIENTO. Una multitud de 53.775 aficionados celebró la hazaña en el estadio de Atlanta, aunque el camino hasta el récord fue un reflejo del racismo y la intolerancia que rodeaba entonces al beisbol.

DEBUT. A los 18 años, Aaron militó en los Indianapolis Clowns, uno de los últimos equipos de las extintas Ligas Negras, y en 1954 jugó su primer partido en las Grandes Ligas con los Bravos de Milwaukee.

GALARDÓN. Siempre será recordado por su impactante golpeo, que llevó a las Grandes Ligas a crear el premio Hank Aaron al mejor bateador anual.

INMORTAL. Ingresó en el Salón de la Fama en 1982 y, en 2002, el Presidente George W. Bush le concedió la Medalla Presidencial de la Libertad.

“ADMIRADO POR SU SENCILLEZ”; LEÓN FUE COMPAÑERO DEL JONRONERO

Maximino León encontró hace unos días una valiosa fotografía en la que posa junto a Hank

Aaron, justo en los tiempos que el estadunidense se convirtió en el Rey del Jonrón. El pitcher mexicano llevó a restaurar esa joya en papel sin imaginar que llegaría la noticia del fallecimiento del miembro del Salón de la Fama.

Era una persona amable conmigo y todos lo admirábamos por su sencillez”, dijo León quien debutó con los Bravos en 1973.

Hoy me entero de que murió Hank… y lo puedo llamar Hank porque él nos dio esa libertad de tratarlo de esa forma”.

Maximino León (izq.) compartió la fotografía junto a Hank Aaron. Tambien aparecen Paul Casanova y Dusty Baker.

En la temporada de 1974 Bravos peleaba por avanzar a la postemporada y en el posible roster no aparecía el veracruzano. Fue Hank Aaron, quien abogó: “se queda, está haciendo bien el trabajo”.

Ese fue un detalle que nunca voy a olvidar. Era un líder y muy profesional, no te hacía a un lado, ni te veía de reojo como muchos que ni siquiera voltean a verte”.

El primer juego que Maximino León abrió con Bravos lanzó la ruta completa y recibió el apoyo de dos cuadrangulares de Aaron, uno de ellos ante el también mexicano Vicente Romo.

¡Imaginate!…mi primera apertura, gano el partido y tuve el apoyo del Rey del Jonrón con dos jonrones, ¡jamás lo voy a olvidar!”.

León inició la temporada de 1974 en la sucursal de Triple A por lo que no fue testigo directo del batazo con el Aaron superó a Ruth, pero vivió los tiempos cuando se acercaba a la marca.

Había mucha tensión. A Aaron le llegaban cientos de cartas que ponían sobre una mesa grande y un secretario le ayuda a leerlas, entre ellas supimos que había amenazas de muerte. En las giras él estaba encerrado en el hotel. Al salir de los estadios había una caravana de seguridad hasta que se subiera al autobús. Supe que su guardaespaldas estuvo a punto de disparar su arma cuando los aficionados lo rodearon en el campo luego de romper la marca de Ruth”.

Maximino León, quien fue llamado de regreso por Bravos esa misma campaña, revela otra anécdota

Al pitcher que le dio el jonrón del record, Al Downing, los Dodgers lo quisieron cambiar a Bravos por mí, pero Atlanta no aceptó el cambio porque Downing entonces ya era un lanzador veterano”.

ROMO, UNA DE SUS VÍCTIMAS

Vicente El Huevo Romo suelta una espontánea carcajada y acepta que es un orgullo aparecer en la lista de víctimas de Hank Aaron. El legendario lanzador es el único mexicano que recibió un vuelacercas del histórico jonronero.

Es un honor, claro que sí. El amigo era un figurón y a los mejores pitchers le pegaba. Yo tiraba muchos strikes y por eso a veces me pegaban jonrones. Recuerdo que ese partido fue en San Diego y había mucha expectación porque se acercaba al récord”, dice Romo en charla telefónica.

Aaron sólo tuvo a 11 lanzadores latinos en la lista de los 755 cuadrangulares. A quien más le conectó fue al inmortal dominicano Juan Marichal con 11.

Todos los jonrones que te pegan duelen, más cuando es para que te ganen un juego. Pero el que haya sido Hank Aaron, sí da orgullo. Lo mismo pasaba con Héctor Espino cuando lo enfrenté en México. A veces lo dominaba y a veces me pegaba, así son los grandes jonroneros… así es el beisbol”.

El entonces lanzador de los Padres de San Diego entró como relevista en ese encuentro y recibió el vuelacercas en el partido celebrado el 3 de septiembre de 1973 y que también resultó histórico para el beisbol mexicano en el que el veracruzano Maximino León se llevó la victoria por los Bravos 7-3. Aaron también le dio jonrón a Clay Kirby.

A Romo se lo conectó en la quinta entrada, fue el número 35 para Aaron en esa campaña y el 708 en la carrera del toletero de los Bravos, que de esta forma se quedaba a siete del récord que impuso en la siguiente temporada.

Era un pelotero muy educado, no era fanfarrón como otros. Si te veía te saludaba, era muy sencillo”, recuerda Romo sobre el famoso jonronero, quien falleció ayer.

El Huevo Romo enfrentó durante su carrera en cuatro turnos oficiales a Aaron. El estadunidense le pegó el jonrón y un sencillo, además recibió un pasaporte intencional.

Era un bateador con mucho poder, si te descuidabas poquito te iba a sacar la pelota. Así ha sido en las Grandes Ligas, pero lo importante es que me tocó enfrentar a un bateador de esa clase”.

A muchos pitchers les duele recibir un jonrón, pero a Vicente Romo el 708 de Aaron le sigue provocando un buen recuerdo.

Fuente: AP

enero 23, 2021 - 12:15 pm

Por: Staff

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