El vicecoordinador del Grupo Parlamentario del PT, Gerardo Fernández Noroña, calificó como prioritario defender la soberanía energética, toda vez que durante el régimen neoliberal se puso a las empresas privadas y extranjeras por encima de las necesidades de la sociedad mexicana.
En un comunicado, sostuvo que anteponer el interés del pueblo de México a los de las compañías foráneas no significa que se esté en contra de la libre competencia; por el contrario, se busca que los particulares no se aprovechen de los recursos de Comisión Federal de Electricidad (CFE), ni de la gente.
“No se va a desalentar ninguna inversión extranjera, no se va a tocar ningún patrimonio invertido, no hay ninguna intención de monopolio o extradición; es más bien una decisión de poner las cartas sobre la mesa a favor de la ciudadanía”, aseguró el parlamentario por la Ciudad de México.
Afirmó que son 400 mil millones de pesos al año el atraco que estas empresas hacen a la patria. Consideró estas acciones inaceptables e insostenibles, “por lo que es crucial construir una Reforma Energética que sea de verdadera utilidad para nuestra nación y detener de una vez por todas la aberración de que en pleno siglo XXI haya gente sin acceso a electricidad”.
Por su parte, el diputado Reginaldo Sandoval Flores (PT) reiteró la prioridad del gobierno de la Cuarta Transformación respecto de la autonomía energética, por lo que llamó a que el trabajo legislativo esté encaminado en la dirección de la profunda reforma que requiere México en ese tema.
“Estamos en una crisis universal de electricidad, están colapsando todos los sistemas eléctricos mundiales que tenían una carga privada y la transición hacia las energías es algo que se debe analizar con mucho cuidado y profundidad y observar las dificultades energéticas que hay en países como España, China y Estados Unidos”, alertó el congresista de Michoacán.
Insistió que en la bancada del PT no está en contra de lo privado, pero sí de los excesos y del manejo corrupto de convenios y acuerdos, que provocaron un gran desfalco de los recursos públicos durante el viejo régimen. “Hay que poner orden, pero no a costa del presupuesto público, vía subsidios o convenios irregulares que dañen las arcas de la Federación”.
Foto: Cámara de Diputados