El coordinador de los diputados del PAN, Juan Carlos Romero Hicks, sostuvo que “hay que cambiarle muchas comas” a la iniciativa preferente del Ejecutivo Federal que plantea reformar la Ley de la Industria Eléctrica.
En un comunicado, relativo a su participación en el arranque del Parlamento Abierto virtual para analizar la propuesta presidencial, el dirigente de la bancada panista indicó que contrario a lo que dijo el Presidente de la República sobre no cambiarle ni una coma a su iniciativa, “sí hay que cambiarle muchas comas, ponerles punto y seguido, punto y aparte, y mejores contenidos”.
Subrayó que la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica debe ser para tener una Comisión Federal de Electricidad (CFE) “que nos enorgullezca, que sirva a todos los mexicanos y que hagamos a un lado estos criterios espurios de pasiones que no nos llevan a mejores soluciones”.
“No estamos para ocurrencias ni para criterios espurios, sino para hacer una reflexión profunda, amplia e integral para buscar las mejores soluciones al sector, afirmó
Apuntó que cuando se habló de la presentación del Ejecutivo Federal de una iniciativa preferente al Congreso de la Unión, “esperábamos soluciones a la salud, a la economía y el empleo, a la inseguridad creciente, a la corrupción que no hemos sabido atender de manera efectiva”.
No obstante, recordó que, en materia de industria eléctrica, “la Suprema Corte de Justicia de la Nación decidió que lo que tenemos que buscar es la libre competencia y la concurrencia, los criterios de eficiencia económica que van desde la generación de energía, la distribución y al final del día el propio consumo”.
“Por eso, los panistas no quieren una reforma que atente contra la economía de las familias mexicanas, que pueda vulnerar la certeza jurídica, el crecimiento económico y el bien común”, manifestó.
“Nuestro Presidente tiene que aprender a escuchar, y en esto tenemos que mirar juntos hacia la construcción de la siguiente generación”, aseguró Romero Hicks, al tiempo que sostuvo que «en el PAN estamos, por supuesto, a favor de la legalidad, la transparencia la rendición de cuentas y no de los argumentos ideológicos que nos dejan en el museo arqueología del siglo pasado”.
Apuntó que en el Parlamento Abierto “lo importante es escuchar y mirar, hablar con la verdad de cara y de frente a este país, ojalá que el ejercicio sea auténtico y que no quede en una simulación».
“Necesitamos ejercicios como éste, que nos den un diagnóstico y un tratamiento integral del sector; que refieran a las mejores prácticas internacionales; y que cuidemos todo el marco jurídico desde el acuerdo de París -vigente desde el 4 de noviembre de 2016- y que México ratificó; y lo que este Parlamento deberá ver son los costos sociales, económicos y políticos de este conjunto de circunstancias que vivimos en este momento”, finalizó.
Por su parte, el vicepresidente de la Mesa Directiva, Xavier Azuara Zúñiga (PAN), se refirió a la estrategia nacional de energía que está emprendiendo la actual administración.
Consideró que dicha estrategia debe articularse también con los diversos tratados internacionales en materia de protección al ambiente y energías renovables como lo es la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y con el marco jurídico nacional que protege los principios de libre concurrencia.
A su vez, el diputado Hernán Salinas Wolberg (PAN), secretario de la Comisión de Energía, al dirigirse a la mayoría parlamentaria de la Cámara de Diputados, dijo “que si lo que quieren es regresar al monopolio estatal en la generación de energía, entonces que presenten su iniciativa para cambiar el texto plasmado en la Constitución General de la República”.
“Entonces, sí tendrían el andamiaje jurídico para lo que pretenden hacer. Hoy, la Constitución no les da y no les va a dar para lo que pretenden hacer con este cambio de ley”, advirtió.