El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, aseguró que el gobierno no actúa por la fuerza sino por la razón y negó que haya amagos a los gobernadores, pero aclaró que la ley especifica que hay responsabilidades para quienes no respeten el semáforo de riesgo sanitario.
Confirmó que durante la reunión que sostuvo con los gobernadores y la Secretaría de Gobernación hubo diferendo, pero rechazó que se haya tratado de un encuentro “ríspido” y pidió que más que fijarse en el tono de la discusión, se vaya al fondo de lo que se dijo, que es lo importante.
En este sentido, agregó que si el gobierno federal le dice a un estado que se encuentra en semáforo rojo y esa entidad decide abrir su actividad en color naranja, debe asumir esa responsabilidad y deslindar al gobierno federal.
También desmintió que no vaya a acudir a la reunión convocada para el próximo lunes entre los gobernadores y la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, los titulares del IMSS, ISSSTE, Fuerzas Armadas, así como de las secretarías de Salud, del Trabajo y de Economía.
“Es una decisión implícita, ahí estaré, hasta ahora no hay nada que me diga que no pueda asistir”, sostuvo.