CIUDAD DEL VATICANO.
El tribunal penal del Vaticano absolvió al sacerdote italiano Gabriele Martinelli acusado de violación de un menor de edad.
Los jueces exoneraron también el sacerdote Enrico Radice, de 72 años, quien era entonces el rector de la entidad donde se produjeron las presuntas violaciones, procesado por haber protegido sistemáticamente al presunto agresor.
Esto ocurrió un día después de la presentación de un informe que reveló que 216 mil niños fueron víctimas de abuso en la Iglesia francesa desde 1950.
A Martinelli se le acusó de violación agravada y actos de lujuria agravados.
Mientras que a Radice se le imputó el delito de encubrimiento ya que a pesar de haber sido avisado de los hechos no denunció la acusación.
En julio pasado, la Fiscalía había solicitado seis años de prisión contra Martinelli, acusado de violación, y cuatro años contra el padre Radice, por complicidad.
Sin embargo, el tribunal dictaminó en su veredicto que fueron absueltos.
La absolución del cura Enrico Radice del cargo penal de encubrimiento se debe a que el delito ya prescribió, detalló el órgano fiscal de la Santa Sede.
Por su parte, las acusaciones de violencia agravada contra Gabriele Martinelli fueron desestimadas por los jueces del Vaticano por falta de pruebas.
En el caso de los actos de lujuria agravados el tribunal determinó que la conducta no era punible.
Los hechos comenzaron presuntamente en 2007, en el preseminario San Pío X, cuando ambos eran adolescentes, de 14 y 13 años respectivamente.
Los abusos se repitieron durante cinco años hasta 2012, cuando Martinelli ya tenía 19 años.
El centro de formación donde presuntamente sucedieron los abusos funciona como alojamiento para jóvenes que ayudan en las misas de sacerdotes del Vaticano y también en las celebradas por el Papa, por lo que son conocidos como los monaguillos del Santo Padre.
La justicia del Vaticano abrió diligencias en 2017 después de la publicación del libro Pecado original, del periodista italiano Gianluigi Nuzzi, quien denunció los abusos en ese seminario.
Y EL PAPA EXPRESA “VERGÜENZA”
El papa Francisco condenó los abusos sexuales cometidos en la Iglesia católica.
Deseo expresar mi tristeza a las víctimas por los dolores y los traumas que han sufrido. Y también mi vergüenza, nuestra vergüenza,
mi vergüenza, por la tan larga incapacidad de la Iglesia para ponerlos en el centro de sus preocupaciones, asegurando para ellos mi oración”, declaró el pontífice en su audiencia semanal.
Ésa fue la respuesta de Francisco luego de que el pasado martes, un comité divulgó un informe que reveló que 216 mil menores fueron víctimas de abuso en la iglesia francesa en los últimos 70 años.
Recemos todos juntos: a ti, Señor, la gloria, a nosotros la vergüenza. Éste es el momento de la vergüenza”, afirmó el mayor representante de la Iglesia católica.
AFP y DPA