El especialista Alfredo de Jesús Celis de la Rosa dijo que, en términos generales, los accidentes aumentan entre 10 y 25 por ciento durante esta temporada de vacaciones.

En entrevista para Notimex, el investigador del Centro Universitario de Ciencias de la Salud (CUCS) agregó que, en el caso de los niños, “se incrementan los accidentes que ocurren dentro del hogar de manera principal porque duran más tiempo en sus casas que en la escuela”.

Manifestó que cuando hay clases o actividades escolares los menores “duran toda la mañana en la escuela y cuando están de vacaciones están todo el tiempo en su casa”.

Dijo que el ambiente de la escuela es más controlado que el de la vivienda, “generalmente en la escuela los tiempos en que el niño está sin supervisión de parte de un maestro se limitan probablemente a la entrada, a la salida y al recreo, mientras que la mayor parte de la mañana están en clases y de alguna manera en actividades controladas dentro de un salón”.

El también director de la División de Disciplinas para el Desarrollo, Promoción y Preservación de la Salud añadió que otra diferencia es que en las escuelas las condiciones en las cuales los niños pueden accidentarse son menores que en la vivienda.

“Cuando los niños están todo el tiempo en la vivienda la exposición al tipo de accidentes que pueden sufrir está más presente; desde el punto de vista de las lesiones mortales, la más frecuente en nuestro medio es la asfixia por inmersión, el ahogamiento en algún depósito del agua”.

Comentó que en el caso de la vivienda básicamente son por los depósitos de agua “que en nuestro medio están conformados por los aljibes, cubetas o tinas, en particular los baldes grandes de muchos litros que vienen con el detergente, la pintura, etc., y que de alguna manera se consiguen económicamente”.

Mencionó que otros accidentes que pueden ser mortales, “pero que no se presentan como mortales con tanta frecuencia, son los ocurridos por las instalaciones eléctricas, ya que pueden ser electrocutados, aunque generalmente no provocan la muerte”.

Afirmó que otro gran problema en esta temporada son las quemaduras “por instalaciones eléctricas sobrecargadas, ya que a una extensión le llegan a cargar 10 contactos de luces y aparatos, por ejemplo, y eso provoca que pueda haber un incendio por un corto eléctrico o calentamiento de las instalaciones”.

Celis de la Rosa resaltó que el problema de esos incendios son principalmente la asfixia por los humos que se liberan en la combustión, así como por quemaduras.

Destacó que en esta temporada de celebraciones hay uso de pirotecnia, “por lo que las quemaduras que sufren los niños pueden ser muy graves, porque la superficie corporal de los infantes es más delicada en relación a los adultos, por lo que una lesión de poca extensión puede ser muy importante para un menor de edad”.

Subrayó que otro tipo de accidente son las intoxicaciones, “es necesario mantener bajo llave o en gavetas que no puedan abrir los niños los medicamentos y las sustancias químicas que se utilizan en la vivienda, como pueden ser desde detergentes, hidrocarburos como petróleo y gasolina”.

“O inclusive sustancias corrosivas como sosa cáustica, que frecuentemente se utiliza para limpieza de cochambre en cocinas, pero que además se vende a granel en frascos que parecerían de leche, jugo o refresco”.

Puntualizó que otros accidentes que aumentan en vacaciones son principalmente los registrados en las carreteras, “debido a que hay más circulación de vehículos, y a medida que hay más tráfico el número de lesionados aumenta”.

“Así que cuando uno salga a carretera habría que asegurarse que el vehículo esté en buenas condiciones, manejar en lapsos cortos de tiempo, evitar conducir más de tres horas sin tener un descanso, ya que la fatiga es un factor de riesgo muy importante”.

Detalló que hay distractores “como llevar niños jugando dentro del vehículo, lo cual puede provocar accidentes, así como el uso de equipos de sonido muy escandalosos y, por supuesto, hay que evitar conducir en estado de ebriedad, respetar los límites de velocidad y no llamar por teléfono cuando se conduce”.

El experto aclaró que hacer una llamada por teléfono en manos libres no disminuye el riesgo de un accidente, “ya que no es sólo el hecho de llevar en la mano el celular, sino también la distracción que implica el estar conversando por teléfono”.

Señaló que durante las vacaciones aumenta la exposición al agua e incrementa el riesgo de asfixia por inmersión en centros vacacionales.

“Algunas precauciones serían en primer lugar no combinar el alcohol con el ingreso a albercas, a ríos, a lagos, al mar, etcétera; además, no meterse a lugares inseguros, hay que evitar las presas porque suelen ser peligrosas para nadar”, comento.

Celis de la Rosa indicó que los ríos también son peligrosos por la fuerza de la corriente, “también hay que atender las recomendaciones en las playas, si hay bandera amarilla o roja evitar meterse al mar”.

Aseguró que el principal problema mortal para niños de uno a cinco años en el hogar es la asfixia por inmersión; “el ahogarse en aljibe o en balde, entonces el aljibe debe estar cerrado con candado y para extraer agua hay que utilizar una bomba que evite que estemos abriendo y cerrando su tapa”.

“Evitar esos baldes de 40 litros y de preferencia utilizar de menor volumen, de preferencia baldes donde la base es menor que la boca del mismo e inclusive todos los baldes y tinas sólo tenerlos con agua cuando se necesite, mantenerlos con vigilancia cuanto contengan líquido y si no se requiere más tirar el agua”, dijo.

Agregó que “medicamentos y sustancias químicas hay que tenerlos cerrados, asegurarse de que las instalaciones eléctricas sean adecuadas, evitar el consumo de alcohol, no conducir a exceso de velocidad y con eso resolvemos una gran cantidad de accidentes que provocan lesiones”.

Manifestó que estos son básicamente los accidentes que con mayor frecuencia se presentan en el periodo de vacaciones.

“Hay que disfrutar de las vacaciones de tal manera que no nos arrepintamos de habernos salido, por lo que la prevención es fundamental, debemos tener nuestra casa en condiciones seguras para disminuir el riesgo a accidentes”, concluyó.