El parón vacacional de la Fórmula Uno, habitualmente en agosto, se adelanta a los meses de marzo y abril, y se amplía a tres semanas en lugar de dos, a causa del coronavirus, según informó este miércoles el organismo rector deportivo de la FIA (Federación Internacional del Automóvil).
El Mundial de F1 tenía que haber arrancado el pasado fin de semana con el Gran Premio de Australia, en el circuito semiurbano de Albert Park, en Melbourne, pero a última hora -el pasado viernes, poco antes de la hora en la que estaba previsto arrancasen los entrenamientos libres- se anunció la cancelación del mismo, a lo que se añadió el de las siguientes tres carreras previstas, los Grandes Premios de Barhéin (que con anterioridad se anunció que se disputaría a puerta cerrada), Vietnam y China; que inicialmente ya había quedado «pospuesto».
Durante el parón, todos las escuderías tienen la obligación de parar cualquier actividad relacionada con los coches y con las carreras, según anunció el organismo rector deportivo de la FIA, que precisó que el periodo de cierre vacacional de julio y agosto se traslada a marzo y abril.
«A la luz del impacto global del coronavirus covid-19 que actualmente afecta a la organización de los eventos del Campeonato Mundial de Fórmula Uno de la FIA, el Consejo Mundial del Deporte del Motor aprobó un cambio del reglamento deportivo de la Fórmula Uno para 2020 que traslada el período de cierre de verano de julio y agosto a marzo y abril; y lo extiende de 14 a 21 días», explica el comunicado hecho público este miércoles.
«Todos los competidores deberán afrontar un periodo de cierre de 21 días consecutivos, durante los meses de marzo y/o abril», explica el comunicado.
«El cambio fue apoyado de forma unánime tanto por el Grupo Estratégico como por la Comisión de la F1», añade el texto hecho público este miércoles por el citado organismo.