La industria nacional de restaurantes en Estados Unidos se prepara para la redada de la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) que podría acorralar a cientos de familias migrantes que engrosan las filas de esa industria y que han recibido órdenes de deportación, según el Washington Post.
Los dueños de los restaurantes y grupos de defensa de los trabajadores esperan que la operación no interrumpa un negocio que ya está perjudicando al personal, o que se extienda a una investigación más amplia de los empleados que no están en las listas de deportación del Gobierno de Trump.
Tras el anuncio del presidente Donald Trump que llevará a cabo redadas masivas de migrantes este domingo hasta en diez ciudades, diversas asociaciones de restaurantes enviaron correos a sus miembros perseguidos para advertirles de sus derechos en caso de que ICE toque a sus puertas.
La Asociación de Restaurantes de California, la Asociación de Restaurantes de Illinois, los Centros de Oportunidades de Restaurantes Unidos (que aboga por los trabajadores de restaurantes), los estadounidenses de Asia del Sur dirigiendo juntos (que aboga por los derechos de los asiáticos del sur en los Estados Unidos) y el Centro de Derecho de Restaurantes de la Asociación Nacional de Restaurantes estuvieron entre los grupos que alertaron a los migrantes sobre las acciones esperadas de ICE.
En sus mensajes, las asociaciones hicieron énfasis en que los agentes de ICE deben tener una orden judicial firmada para ingresar al lugar de trabajo y que los empleados tienen derecho a guardar silencio, es decir, a no incriminarse.
Según dijo al WP la presidenta de ROC United, Saru Jayraman, dijo que el miedo es parte de la estrategia de Trump y que por eso anunciaba la redada con anticipación. Lo cierto es que ese día es muy probable que los migrantes no vayan a sus lugares de trabajo, dejando en vilo a los restaurantes.
«Cada vez que surge esta nueva amenaza, los trabajadores no se presentan», dijo Jayaraman. «Esta no es la primera vez, y cada vez que no sólo perjudica a los trabajadores y su familia, sino a los propietarios y clientes».
La industria de los restaurantes es particularmente sensible a las redadas puesto que alrededor de un 8 por ciento de la fuerza laboral consta de migrantes, es decir que hay en EU unos 1,3 millones de trabajadores indocumentados en la industria del ‘ocio y la hospitalidad’, según el Pew Research Center.
«Apostaría dos semanas de paga que todas las empresas con más de 20 empleados en el sector hotelero tengan al menos un empleado indocumentado», dijo al Post Madeleine Tillotson, directora de ventas y marketing de Chicago de Rooam, una empresa de pagos móviles centrada en la industria de restaurantes.
Aunque la Administración de Trump dijo que las redadas se dirigen sólo a familias que hayan pasado por el debido proceso y que hayan recibido una orden de deportación definitiva, la coalición de organizaciones de derechos migrantes SAALT dijo que se ha planteado ir más allá de sus objetivos originales para perseguir a niños no acompañados que tengan 18 años o más.
Preguntada por los alcances de las operaciones de la agencia fronteriza, la portavoz Kate Pote dijo que ICE no realiza redadas arbitrarias.
«Los oficiales de ICE conducen rutinariamente acciones de cumplimiento de la norma específicas. Los oficiales no realizan ‘redadas arbitrarias’ ni ‘redadas’, ni se involucran indiscriminadamente con y / o arrestan a individuos», escribió Pote en un correo electrónico.
Lo anterior en contraste con la experiencia de arrestos situados que han llevado a los llamados ‘arrestos colaterales’, aquellos que no estaban planeados en primer lugar.
También hay preocupación entre los dueños de restaurantes de que la agencia pueda coordinarse con la Administración de Seguridad Social que según el New York Times ha enviado cartas a 570 mil empleadores advirtiendo que los nombres de algunos empleados no coinciden con los números de Seguridad Social, lo que podría llevar a ICE a apuntarlos en sus listas.
Una vez detenidos, el Cuerpo de Justicia para Inmigrantes pondrá abogados a su servicio que presentarán mociones de emergencia para reabrir sus casos, puesto que, según su director Jojo Annobil, tienen un buen argumento para solicitar asilo al enfrentar amenzas legítimas en sus países de origen.
«Hay una manera más humana de hacer esto», dijo Annobil al Post sobre el sistema que lidia con la migración.