La Cámara de Diputados aprobó, en lo general y en lo particular, el dictamen a la minuta que reforma, adiciona y deroga diversas disposiciones de las leyes de Coordinación Fiscal y General de Salud, para consolidar la federalización de los servicios de salud del Instituto Mexicano del Seguro Social para el Bienestar (IMSS-Bienestar).
El dictamen fue aprobado en lo general con 207 votos a favor, 167 en contra y cero abstenciones; mientras que en lo particular se emitieron 203 votos en pro, 153 en contra y cero abstenciones. Se remitió al Ejecutivo Federal para sus efectos constitucionales.
Las modificaciones a los artículos 25, 29 y 30 de la Ley de Coordinación Fiscal, y a los artículos 3, 7 y 77 Bis 16 A de la Ley General de Salud, establecen que las entidades federativas que no suscriban el convenio de coordinación con el IMSS-Bienestar se sujetarán a lo previsto en la ley respecto al Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud.
Señala que en el caso de las entidades federativas que suscriban o hayan suscrito dicho convenio recibirán el monto de los recursos que correspondan del Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud, con objeto de destinarlo a las obligaciones que conserven en términos de la Ley General de Salud.
Indica que el monto que corresponda a Servicios de Salud IMSS-Bienestar en términos de los convenios de coordinación que éste suscriba con las entidades federativas, se asignará de origen en el Presupuesto de Egresos de la Federación a dicho organismo.
En los convenios se establecerán disposiciones que regulen el traspaso a IMSS-Bienestar de las plazas en las que complementa el pago de los servicios, en términos de las disposiciones jurídicas aplicables.
El documento precisa que la aprobación de la minuta es necesaria, pues constituye un paso para lograr que los recursos de origen federal asignados para la prestación gratuita de servicios de salud se concentren operativa y normativamente en el responsable de su ejercicio, es decir, IMSS-Bienestar, así como el cierre de una etapa más dentro de los esfuerzos por cumplir con el servicio de atención médica a todas las personas del país.
Establece que la reforma es oportuna al acarrear beneficios en el modelo de Atención de Salud a las personas sin seguridad social, como consecuencia de la asignación directa al presupuesto del IMSS-Bienestar de los recursos financieros que hoy son asignados vía el Fondo de Aportaciones para los Servicios de Salud (FASSA) a las entidades concurrentes.
Consolidar la federación del Sistema de Salud para el Bienestar
Al fundamentar el dictamen, el diputado Arturo Roberto Hernández Tapia (Morena), explicó que se busca consolidar la federación del Sistema de Salud para el Bienestar, mediante la armonización de la Ley de Coordinación Fiscal con las disposiciones de la Ley General de Salud, específicamente en cuanto hace a la operación del Sistema de Salud para el Bienestar y la concurrencia en la prestación de servicios de salud a las personas sin seguridad social, entre el IMSS-Bienestar y las entidades federativas que suscriban el convenio correspondiente.
Destacó que esta reforma es muy importante porque ayudará a completar el mecanismo de federalización del sistema de salud del país, a través de la implementación de un sistema de colaboración y coordinación de personal, infraestructura, equipamiento, medicamentos y demás insumos asociados con el IMSS-Bienestar y las entidades federativas.
La reforma, precisó, plantea un sistema jurídico-administrativo-financiero, que permite que los recursos que corresponden a las entidades federativas para salud, sean canalizadas al IMSS-Bienestar a través del Fondo de Salud para el Bienestar, fideicomiso público reconocido en el artículo 77 Bis 29 de la Ley General de Salud.
Actualmente, refirió, existe un esquema que genera múltiples implicaciones que obstaculizan el ejercicio eficiente de los recursos en materia de salud; por eso, indicó, es pertinente esta reforma que armoniza la prestación de servicios de salud y las personas sin seguridad social entre el IMSS-Bienestar y las entidades federativas.
En salud, México está a la par de Bolivia, Botsuana y Omán
El diputado del PAN, Éctor Jaime Ramírez Barba, mencionó que durante esta administración se han otorgado tres billones 526 mil millones de pesos al rubro de salud que hoy se discute, lo cual ha permitido que del 2019 a 2021 se baje cuatro años la esperanza de vida, es decir, coloca a México a la par Bolivia, Botsuana y Omán.
Por otro lado, han logrado que de 20 millones de mexicanos que no tenían acceso a la salud, ahora haya aumentado a 50 millones, y duplicaron la población catalogada en pobreza a consecuencia de problemas de salud, incrementaron a tres veces la mortalidad materna, que el tamiz ampliado a las niñas y niños del país no se realice, y que los padecimientos crónicos se elevaran considerablemente.
Habrá fiscalización sobre el manejo de los recursos
La diputada María Sierra Damián (Morena) señaló que lo que se quiere es tener un convenio de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público con los estados que tengan el deseo de participar. Precisó que habrá una fiscalización de parte de esta Secretaría sobre el manejo de los recursos públicos y del dinero.
“Nosotros queremos pensar que con los gobiernos que tengan honestidad y capacidad de trabajo podamos llegar a eso que la misma Constitución en el artículo primero y cuarto habla sobre derechos humanos y derecho a la salud se pueda llevar”, puntualizó.
Se pone en retroceso la dignificación de la salud
El diputado Abramo Masso Yerico (PRI) expresó que su voto sería en contra porque la reforma atenta contra la Ley de Coordinación Fiscal y detiene el crecimiento federalista del país; además, pone en retroceso la dignificación de la salud de la ciudadanía y se transgrede la libertad y la garantía constitucional de tener salud pública digna.
Agregó que con esta modificación se abandona a los estados y se rompe el pacto federal, lo cual dañará la ya de por sí lacerada salud de todas y todos los mexicanos, y coloca en riesgo de mayor pobreza a la población que más lo necesita.
Avanzar en la implementación del Sistema de Salud
Por el PVEM, el diputado Kevin Angelo Aguilar Piña, indicó que su voto sería a favor, toda vez que este dictamen tiene como finalidad avanzar en la implementación del Sistema de Salud para el Bienestar y atender diversas problemáticas en el ámbito laboral de las y los trabajadores de este sector.
Asimismo, constituye un paso natural para lograr que los recursos de origen federal asignados a la prestación gratuita a los servicios de salud se concentren operativamente y normativamente en el IMSS- Bienestar, lo que permitirá fortalecer el Sistema de Salud del país en condiciones dignas para todas y todos.
No se quiere quitar el dinero a los estados
La diputada del PT, Margarita García García, apuntó que su voto sería a favor, ya que la reforma tiene como objetivo armonizar la ley y aclaró que se no se quiere quitar el dinero a los estados, ya que es dinero federalizado, sino que se destinarán los recursos directamente al IMSS-Bienestar, quien lo administrará de manera puntual.
Agregó que estas adecuaciones contribuirán a que se les pague a los trabajadores oportunamente, se asegura la compra de medicamentos y equipo necesario para una salud eficiente al país. Con esta reforma se quita a los estados esa triangulación de recursos que evita que se garantice una salud eficiente y permite que llegue para toda la ciudadanía.
Se centralizan los recursos de salud de los estados
De MC, el diputado Braulio López Ochoa Mijares señaló que se busca que se entreguen a la Federación los recursos que son de los estados para sus sistemas de salud estatales, por lo que el Fondo de Aportaciones para Servicios de Salud pasaría a ser manejado por el IMSS-Bienestar.
Anunció su voto en contra porque “no permitiremos el desmantelamiento del Sistema de Salud”. Enfatizó que no se toma con seriedad el tema de salud y se hacen inventos y experimentos que han sido infructuosos. Destacó que se debe defender el presupuesto de las entidades federativas.
Existen vicios de origen en la reforma
El diputado Marcelino Castañeda Navarrete (PRD) señaló que existen varios vicios de origen en la reforma y es “un asalto al patrimonio de las entidades federativas”, ya que tendrán que transferir los recursos propios a los hospitales de los estados”. Enfatizó que no solo disminuye el presupuesto en materia de salud para sostener los hospitales, los servicios, el crecimiento de las plantillas laborales, sino lo que cobran por servicios que ellos mismos generan.
Con esta modificación, indicó, la administración de todos los centros de salud pasará al control del Gobierno Federal, la infraestructura médica ya no será administrada por gobiernos estatales, aunque en sus presupuestos tengan destinados recursos públicos. “El atropello a los estados es flagrante”.
Posturas a favor y en contra
La diputada Martha Estela Romo Cuéllar (PAN) indicó que el impacto real del dictamen es que los estados entregarán a la Federación el control absoluto de la salud. “Se renuncia a decidir qué pasa y qué se hace con el manejo de la salud; se les da a ciegas el control de la salud a la Federación y renuncian al dinero para mantenerlo”.
Daniel Gutiérrez Gutiérrez, diputado de Morena, aseguró que la reforma evita triangular los recursos, brinda certeza y estabilidad al personal de salud, homologa la calidad de atención a los usuarios y contribuye a garantizar el derecho a la salud. “No se vulnera ni pone en riesgo el pacto federal, sino garantiza los recursos suficientes para la prestación de los servicios”.
Por el PRI, Mariana Erandi Nassar Piñeyro afirmó que la centralización de los servicios de salud que se pretende realizar no considera que los recursos que por ley le corresponde a cada entidad sean usados única y exclusivamente en ellas y no podrán ser desviados a otros fines; se viola el pacto federal y el federalismo fiscal, y resta soberanía a las entidades.
A su vez, el diputado Alfredo Femat Bañuelos (PT) expuso que, a cinco años de este gobierno, todos los indicadores macroeconómicos tienen una situación inmejorable y hay un buen manejo de la economía; es falso que se pretende acabar con el Federalismo; se quiere acabar con la triangulación y los recursos de Hacienda lleguen directamente al IMSS-Bienestar.
La diputada Elizabeth Pérez Valdez (PRD) mencionó que el dictamen busca que las entidades rompan con el pacto federal para darle toda la responsabilidad al Ejecutivo Federal “para que sea el que decida qué sucede con la salud de las y los mexicanos; el modelo del IMSS Bienestar está de facto condenando las entidades a no poder atender los problemas de salud de su población, que también son su responsabilidad”.
Por su parte, el diputado Zeus García Sandoval (Morena) subrayó que resulta trascendental esta reforma porque permitirá evitar la triangulación de recursos que generan subejercicios, así como brindar certeza laboral al personal de salud y a la homologación de la atención al público usuario de servicios de salud. Con ello, se coadyuvará a garantizar el derecho al más alto nivel de salud.
Del PAN, el diputado Román Cifuentes Negrete señaló que “el manejo absurdo, centralista y autoritario de la salud, al igual a como lo están haciendo en seguridad, está representando el gran fracaso” de este gobierno. Afirmó que se atenta contra el federalismo y la capacidad y decisión de los estados de poder brindar el servicio de salud a sus gobernados.
Ángel Benjamín Robles Montoya, diputado del PT, sostuvo que la única implicación es que, para la determinación de los recursos destinados al Fondo de Aportaciones para la seguridad social dentro de Presupuesto de Egresos, ya no se tomarán en cuenta las plazas laborales que las entidades hayan traspasado al IMSS-Bienestar, porque ya no es la entidad federativa la que asume el pago de las plazas.
En su turno, el diputado Xavier González Zirión (PRI) dijo: “evitemos este tremendo desastre que hará palidecer el caos y abandono que hoy sufren cientos de miles de mexicanos que desafortunadamente padecen alguna enfermedad y no cuentan con los recursos para atenderse”. De aprobarse este dictamen, “sufriremos por décadas las consecuencias sanitarias, enfermedad, abandono y muerte”.
La diputada Verónica Collado Crisolia (Morena) dijo que este dictamen tiene como propósito garantizar servicios de salud oportunos y modernos a lo largo del país, a través de un esquema de colaboración y coordinación entre las entidades federativas y el IMSS-Bienestar. También permitirá una homologación y uniformidad en la calidad de los servicios públicos de salud.
Patricia Terrazas Baca, diputada del PAN, mencionó que el IMSS- Bienestar no tiene infraestructura y en cinco años esta administración destruyó el Seguro Popular, crearon el Insabi y “ahora hay hospitales sin medicinas, doctores sin prestaciones y sin instrumentación para cuidar y atender la salud de la ciudadanía”, por ello, anunció que su voto sería en contra.
El diputado de Morena, Joaquín Zebadúa Alva afirmó que esta reforma no quita recursos a los estados, sino se crea un fondo de aportaciones de federales, en las cuales 23 entidades decidieron firmar convenios con la Federación, lo cual no es centralismo, sino concurrencia.
Previamente, se desechó la moción suspensiva presentada por la diputada Leticia Zepeda Martínez (PAN) quien argumentó que la Ley de Coordinación Fiscal, diseñada para fortalecer la hacienda pública de los gobiernos locales, se ve vulnerada al desparecer el Fondo de Aportaciones para los servicios de salud.
Reservas
Para la discusión en lo particular, se presentaron reservas a los artículos 25, 29 y 30 de la Ley de Coordinación Fiscal, y a los artículos 3, 7 y 77 Bis 16 A de la Ley General de Salud, las cuales fueron desechadas.
Foto: Cámara de Diputados