Con 463 votos a favor y uno en contra, la Cámara de Diputados aprobó adicionar la Ley Federal para el Fomento de la Microindustria y la Actividad Artesanal, con el fin de apoyar a la microindustria y la actividad artesanal.

Con esto, la Secretaría de Economía, con la participación, en su caso, de las demás dependencias y entidades competentes de la Administración Pública Federal, así como de los gobiernos de los estados y municipios, podrá establecer programas emergentes de apoyo a la microindustria y la actividad artesanal en caso de que se emita una declaratoria de emergencia o desastre, que imposibiliten su desarrollo total o parcial.

La adición de una fracción VI al artículo 7 de la citada ley, se remitió al Senado de la República para sus efectos constitucionales.

El documento menciona que la actividad artesanal debe ser apoyada por el sector gubernamental en situaciones de emergencia y no sólo de pandemia, ya que la categoría de emergencia, definida ya en el orden legal de acuerdo a la consideración anterior, implica cualquier situación anormal.

Subraya que las situaciones anormales deben ser atendidas a través de la eficaz acción gubernamental, para limitar en lo posible, el daño a la sociedad y desde luego, como señala definición para garantizar la seguridad y la integridad de la población.

Refiere que durante la pandemia del Covid-19 tanto la seguridad como la integridad de las personas se ha visto en riesgo ante la necesidad de dejar la reclusión para desarrollar actividades económicas necesarias para el sustento personal y familiar

Al fundamentar el dictamen, el diputado José Antonio Zapata Meraz (PAN), integrante de la Comisión de Economía, Comercio y Competitividad, mencionó que de acuerdo al Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías existían cerca de 12 millones de artesanos en México en el año 2019, y a la fecha hay 8 millones de artesanos registrados; esto quiere decir que, por efectos de la pandemia, cerca de 4 millones disminuyeron en esta actividad.

Por ello, dijo, es fundamental apoyar a los micronegocios y al sector artesanal que contempla a 21 mil 115 empresas de artesanías que generan el 4 por ciento del Producto Interno Bruto del turismo de nuestro país. Que los tres niveles de gobierno implementen políticas públicas y programas que apoyen a estos sectores de la población para que puedan tener una reactivación en estas y otras actividades.

Es necesario, agregó, que la Secretaría de Economía establezca programas emergentes de apoyo a la microindustria y a la actividad artesanal en caso de que se emita una declaratoria de emergencia. “Es importante proteger y apoyar al sector artesanal pues este es un sector de tradiciones, cultura, arte, pero sobre todo un sector que trabaja para mantener viva su historia y la diversidad cultural del país”.

La diputada María Teresa Castell de Oro Palacios (PAN) señaló que los artesanos aportan a otros sectores como el turismo más de 62 mil millones de pesos anuales, lo que los convierte en grandes contribuidores del desarrollo de sus regiones y con esto del país; son generadores de empleo y esto da estabilidad a la gente.

Enfatizó que por primera vez se va a garantizar que los artesanos tengan un respaldo en el Gobierno Federal cuando existan contingencias. “Ellos muy pocas veces se sienten escuchados o representados realmente por nosotros; muchos han tenido que abandonar sus actividades para ir a ciudades y dedicarse a otros oficios para sobrevivir y con ello se ha perdido sus negocios y los empleos que generaban”.

En la discusión se desecharon las reservas presentadas por las diputadas Gabriela Sodi Miranda, y Edna Gisel Diaz Acevedo, del PRD, para modificar el Segundo Transitorio.

Foto: Cámara de Diputados