El arzobispo de Puebla, Víctor Sánchez Espinosa, realizó el encendido de la Corona de Adviento, como el inicio del año litúrgico, donde aseguró que son dos días importantes tanto para la religión católica, así como para los judíos, que celebran el Shabat, a como lo dice la sagrada escritura.

El líder religioso explicó que el adviento terminara el 24 de diciembre, ya que son los cuatro domingos anteriores a la Navidad, «el sentido del adviento es avivar en los creyentes la espera del señor”.

Compartió que tradicionalmente las velas de la Corona de adviento son tres moradas y una rosada que se enciende el tercer domingo de adviento, el color morado significa el espíritu de vigilia, penitencia y sacrificio para la preparación de la llegada de Cristo.

En este tenor, el prelado oró porque cese la delincuencia que hay en la ciudad y en el estado, y pidió por la reconversión de quienes cometen estos actos diariamente, cómo robos, feminicidios, lamentó la pérdida valores básicos y tanta criminalidad qué hay en nuestros días.

Invitó a compártase honestamente, nada de borracheras, lujurias ni desenfrenos, ni pleitos, ni envidias, tal como lo hizo Jesús a la comunidad Romana, ya que estás acciones se repiten siglos después, por lo que hay que esperar la venida del hijo de Dios.

Pidió hacer posible la esperanza a aquellos que viven sin ella, dijo que, gracias a las buenas obras, nos haremos merecedores del reino celestial.