Una semana después de que un gran terremoto y posterior tsunami causó una enorme devastación en la isla de Célebes, en el centro de Indonesia, el número de muertos ascendió a mil 558 y se estima que hay más de mil desaparecidos.
Los servicios de búsqueda y rescate de Indonesia estiman que miles de personas necesitan ayuda emergente como consecuencia del fenómeno que azotó el país.
La agencia de desastres indicó que miles resultaron heridas y decenas de miles, posiblemente cientos de miles, desplazados de sus hogares y que necesitan asistencia de emergencia.
Más de 70 mil personas fueron evacuadas a refugios y carpas improvisadas que han brotado a través de Palu, la capital de la provincia de Célebes Central, que alberga a la mayoría de las víctimas y sus áreas circundantes.
El vicepresidente indonesio, Jusuf Kalla, quien llegó la madrugada del viernes a Palu para evaluar la situación, dijo que se necesitarán al menos dos años para reconstruir la zona del desastre.
Más de 70 mil casas fueron destruidas o dañadas por el terremoto de magnitud 7.5 que sacudió el 28 de septiembre, lanzando olas de hasta seis metros de altura que se estrellaron contra la isla a 800 kilómetros por hora.
Palu y la cercana ciudad costera de Donggala son dos de las áreas más afectadas donde se produjeron la mayoría de las muertes después de haber sido las más afectadas por las olas del tsunami hasta tres metros de altura.
Sutopo Purwo Nugroho, portavoz de la agencia de manejo de desastres de Indonesia, dijo que unas mil personas podrían estar enterradas en áreas totalmente licuadas por el terremoto en Balaroa y Petobo, en la ciudad de Palu.
Las áreas fueron tragadas por toneladas de lodo, mientras las operaciones de búsqueda y rescate se han visto obstaculizadas porque el terreno aún está demasiado húmedo para maniobrar.
Hasta ahora, en Petobo, solo se han encontrado 26 sobrevivientes y 48 en Balaroa. «Seguiremos buscando», afirmó Sutopo.
Mientras muchos lugareños esperan desesperadamente los suministros básicos y otros tipos de ayuda, la policía nacional reportó múltiples ataques relacionados con saqueos de tiendas o vehículos con asistencia humanitaria.
A la alarmante situación de muertos, heridos y desastre en la infraestructura, se suma ahora la inseguridad dentro de la mayor parte de los lugares más afectados.
La escasez de alimentos, agua y otros suministros básicos, provocó una serie de saqueos que dejaron un saldo de 92 personas detenidas, por lo que el ejército local desplegó soldados en los comercios de la zona.
Reportes de prensa recientes destacan que después de días de caos inicial y saqueos por sobrevivientes desesperados, algo de estabilidad ha regresado a Palu con algunas tiendas reabiertas y electricidad restaurada en algunas partes de la ciudad.
Indonesia se encuentra en una de las regiones sísmicas más activas del mundo, en la que se producen una gran cantidad de terremotos y erupciones volcánicas.
Célebes Central es una de las cinco islas principales del archipiélago, y como las demás, está expuesta a frecuentes terremotos y tsunamis.