Un barco con 54 migrantes no pudo atracar en el puerto de Lampedusa, en una isla al sur de Italia.
El grupo humanitario Mediterranea Saving Humans tuiteó que su barco bajo el nombre de ALEX se encontraba frente Lampedusa, justo fuera de las aguas territoriales italianas, y que se le prohibió ingresar a la jurisdicción italiana por decreto ministerial.
Entre los migrantes a bordo del barco están 11 mujeres, de las cuales tres están embarazadas, y cuatro niños, quienes podrían tener un deterioro de salud si no son atendidos por las autoridades sanitarias.
Dada la condición de aquellas personas a bordo, el grupo ha solicitado que los migrantes -que fueron rescatados de un bote de goma frente a la costa de Libia el jueves- sean transferidos a barcos de patrulla italianos o malteses.
Agregó que debido a la condición de los migrantes, no podía hacer el viaje a la isla de Malta en el Mediterráneo.
En tanto, el jueves Malta aceptó recibir a migrantes a cambio de que Italia reciba el mismo número. El acuerdo parece evitar lo que sería el enfrentamiento número 21 desde que el Gobierno populista italiano comenzó a rechazar cualquier arribo a puerto a grupos humanitarios que rescatan a migrantes en el mar.
«Debido a las condiciones físicas de las personas a bordo y las características del barco no podemos hacer el viaje a Malta», tuiteó la ONG.
«Pero podríamos transferir a los naufragados a barcos de patrulla malteses o italianos», añadió.
La ONG dijo que el decreto ministerial es ilegítimo porque no se puede aplicar a un barco que transporta personas rescatadas en el mar, y porque Italia no puede prohibir que un barco con bandera italiana entre en sus aguas.
En tanto, el grupo humanitario alemán Sea-Eye dijo que su barco de rescate recogió a 65 personas que fueron halladas en una balsa a unos 55 kilómetros de distancia de la costa de Libia.
El Ministro del Interior italiano, Matteo Salvini señaló el viernes que ninguno de los migrantes rescatados podrá entrar a Italia.