Londres, 15 (Quién).- Este domingo Benedict Cumberbatch fue como nominado en la categoría de ‘Mejor actor principal’ a los premios BAFTA por su papel en la película El poder del perro y, aunque estaba ilusionado por este reconocimiento, tenía otros asuntos más importantes en mente. El intérprete, que no acabó llevándose a casa el galardón por el que estaba nominado, posó en la alfombra roja con un pin de la bandera de Ucrania porque no era capaz de ignorar ni durante una sola noche la dramática situación que se vive actualmente en el país.
«Tenemos hermanos y hermanas que están sufriendo. Es un momento realmente impactante para cualquier europeo, porque estamos a dos horas y media de vuelo de Ucrania. Es algo que se cierne sobre nosotros», aseguró en declaraciones a Sky News. Benedict está dispuesto a hacer todo lo posible para apoyar al pueblo ucraniano tras la invasión rusa y ha seguido de cerca las distintas iniciativas solidarias que se han puesto en marcha durante las últimas semanas.
Una de las que más le interesa, y en la que espera participar con su esposa Sophie Hunter, le llevará a abrir las puertas de su hogar a alguno de los refugiados que han conseguido escapar de la guerra. «Todo el mundo tiene que hacer todo lo que pueda. Creo que hoy se ha dado a conocer la noticia de que ha habido un número récord de voluntarios para acoger a personas en sus casas, y espero formar parte de ello», añadió. Además, durante su paso por la alfombra roja, el actor le dijo a la BBC que es “horroroso lo que vemos todos los días” y que está “mostrando solidaridad con nuestros hermanos y hermanas en Ucrania”.