Los Ángeles, 26 May (20 Minutos).- Hace unos días, la revista Closer Weekly lanzaba un número en el que repasaban cómo está pasando la cuarentena Betty White a sus 98 años (los cumplió el pasado 17 de enero). En él, sin lugar a dudas, dejaba claro que la mítica actriz es todo un portento de la naturaleza.
«Estoy bendecida con una salud increíblemente buena. Eso es algo que aprecio mucho de mí», bromeaba la protagonista de Golden Girls. Su gran amigo y confidente, el artista y showman Tom Sullivan, cree que todo proviene de que «se lee Los Angeles Times de pé a pá».
«Literalmente tiene miles de libros de crucigramas y los está haciendo de una forma constante para que su mente se ejercite. Esto es de veras importante para ella», asegura, refiriéndose a el grado de exigencia que se pone la intérprete para mantener su lucidez.
Otra fuente cercana incide en que, sin embargo, está llevando un poco mal que hayan desaparecido sus noches de juegos con sus amistades. «Intenta jugar al Scrabble a través de videollamadas, pero no es lo mismo», reconoce, antes de dar pie a lo que hace Betty White aislada.
El confinamiento no ha hecho que la cómica pierda la sonrisa y se pasa el día comiendo su plato favorito, «Hot dogs con papas fritas», mientras se bebe un «vodka martini» en su sala de estar. «A ella el encanta hacer chistes sobre que ese es el secreto de su juventud», cuenta la fuente, que desvela que, en ocasiones, White se va a la cocina y se prepara «un buen sandwich de queso a la parrilla».
«Le encanta esa imagen de sí misma sentada en su casa, en una mecedora, bebiéndose un martini y viendo concursos de la tele, pero en realidad no es una gran bebedora. Esa no es ella. De hecho, solo cuando la ocasión lo requiere se toma unos sorbos de un cóctel», le quita la magia al asunto la fuente.
«Ella sabe que la pandemia es grave, pero también dice que hemos pasado por cosas peores. Esto, para ella, es la forma en que la Madre Naturaleza nos recuerda a todos que tenemos que aminorar el ritmo, bajar la velocidad», reconocía esta fuente.
Y ahora, su representante ha hablado con el Daily Mail para dar a conocer que, a pesar de la imagen que pudiese dar en el anterior reportaje, Betty White «lo está haciendo realmente bien» durante el aislamiento en su casa de Carmel, California.
«Tiene las visitas de sus ayudantes, que son geniales, y hasta de animales salvajes en su patio trasero: hay dos patos que siempre se acercan a saludar, llegan hasta la puerta de cristal y miran adentro de la casa», reconoce su representante.
Él mismo es quien bromea: «¡El virus le tiene miedo a Betty!». Sin embargo, más allá de la broma, reconoce que «nadie permitió entrar excepto aquellos que deben hacerlo» pero que el virus no ha hecho que la actriz pierda «su sentido del humor» pues siempre que se llaman «nos acabamos riendo.