México necesitaba del pulso de Alejandra Valencia para el último oro de la delegación mexicana en los Juegos Panamericanos de Lima 2019.
La arquera mexicana venció a la estadounidense Khatuna Lorig en la Final de arco recurvo individual femenil por 7-3.
Tiró sin saber que su última flecha de 10 significaba el último oro para México, el número 37 que le aseguraba el tercer lugar del medallero al País, algo que no conseguía desde los Juegos Panamericanos de 1975, en Ciudad de México.
La cosecha de 37 oros, 36 platas y 63 bronces para un total de 136, se traduce en la mejor actuación de México en Juegos Panamericanos fuera de casa. La delegación superó el pronóstico inicial que manifestó Conade, dirigida por Ana Guevara que apuntaba la meta de 19 oros y una vez rebasados los 544 atletas tricolores igualaron y superaron la marca de las 23 doradas en Mar de Plata 1995 para llegar ayer a una cosecha dorada de 37. Con los nuevos registros mejoraron la actuación de Toronto 2015 y dejaron muy lejos las 95 preseas totales de aquella edición.
México encaró el camino al oro desde el primer día y durante 16 jornadas consecutivas cosecharon al menos un metal dorado. El 10 de agosto fue la jornada más productiva de los mexicanos con siete oros, por encima de los cinco obtenidos el 27 de julio, un día después de la apertura.
Se escaparon algunos metales amarillos como el del taekwondoín Brandon Plaza, que lo luchó hasta el final. Hubo quienes quedaron a deber como el cuarto lugar olímpico Diego del Real, en lanzamiento de martillo, al igual que el tiro deportivo y la vela.
La gimnasia artística y rítmica, el ciclismo de montaña con Daniela Campuzano y Gerardo Ulloa, el raquetbol de la legendaria Paola Longoria, el papel de Mariana Arceo en el pentatlón y el oro en los mil 500 metros de José Carlos Villarreal fueron deportes que brindaron una actuación para el recuerdo.
Los gimnastas Fabián de Luna e Isaac Núñez en finales por aparatos, los dos títulos panamericanos del conjunto de gimnasia rítmica, dirigido por Blajaith Aguilar, los dos títulos panamericanos del clavadista mexicano Juan Celaya en el trampolín individual 1 metro y trampolín 3 metros sincronizados y el destape de Kevin Berlín en la plataforma 10 metros prometen una nueva ruta en el deporte nacional.
México consumó una actuación descomunal de los últimos años de su historia.
Con información de Cancha