Los Ángeles, 16 Mar (Cine Premiere).- Hace 30 años, la carrera de Brooke Shields se encontraba en uno de sus mejores momentos. La actriz había participado en exitosos proyectos como La laguna azul y Amor eterno, pero ser víctima de un poderoso ejecutivo de Hollywood cambió su perspectiva acerca de su labor como actriz y del poder que tienen los hombres en la industria cinematográfica. Ahora, Brooke Shields se une a la larga lista de celebridades que habla sobre ser víctima de abuso sexual, y lo que espera tras contar su historia.
Su relato forma parte del documental Brooke Shields: Pretty Baby, que llegará el 3 de abril a Hulu. En las dos partes que conforman el proyecto, la actriz ahonda en cómo su carrera se vio marcada por la sexualización y la forma en que los hombres la miraban. Shields asegura que su paso por Pretty Baby (donde dio vida a una adolescente prostituta) y La laguna azul provocó que muchos la vieran como un objeto sexual o de fascinación desde muy temprana edad. Y cuando fue abusada por un poderoso ejecutivo hollywoodense, prefirió callar ante los prejuicios de la época.
Esto comentó en entrevista para PEOPLE durante la promoción del documental:
“Nadie me iba a creer. La gente no creía esas historias en ese entonces. Pensé que [si hablaba] nunca volvería a trabajar. Al hacer el documental lo ves todo junto, y es un milagro que sobreviví. Me ha tomado un gran tiempo procesarlo. Estoy más enojada ahora de lo que podía estar entonces. Si tienes miedo, tienes razón. Son situaciones de miedo. No tienen que ser violentas para dar miedo”.
En aquél momento, Shields era recién graduada de la Universidad de Princeton, y según sus palabras, se encontraba en el “punto más bajo” de su carrera, por lo que conseguir un empleo no era algo fácil. Gavin de Becker, una de sus amistades más cercanas, fue la única persona a la que la actriz le contó lo sucedido. Brooke recuerda el momento en que todo sucedió y afirma que fue éste fue muy impactante. Su agresor la invitó a cena y, posteriormente, la convenció de llamar a un taxi desde su habitación de hotel; ahí la agredió.
“Pensé que iba a conseguir una película, un trabajo. No peleé. Solo me congelé. Me repetía a mí misma: ´No debí hacer eso. ¿Por qué fui con él? No debí haber tomado esa bebida en la cena´. Era muy fácil desvincularse porque, para ese entonces, era algo viejo. Y porque era una elección del tipo de lucha o huida. Luchar no era una opción, así que simplemente dejas tu cuerpo. ´No estás allí. No sucedió´”, agregó.
Sin embargo, a tres décadas del abuso sexual, Brooke Shields afirma que todo le dejó una gran enseñanza. Aunque los primeros años fueron traumáticos y ella experimentó ciertas consecuencias, la actriz espera que su testimonio se sume a la lucha para brindar ayuda a quienes así lo necesiten. Quiere ser defensora de más y más verdades para que éstas salgan a la luz y puedan encontrar un poco de justicia.
“Siempre tuve un sentimiento de disociación con mi cuerpo. Con mi sexualidad. Fui, mayormente, una chica de portada, así que todo está aquí”, dijo señalando su rostro. “Y era más fácil apagarme. Fui buena en eso. Comparto mi experiencia con esperanza de ayudar a la gente para no sentirse sola. Cada quién procesa su propio trauma en una línea de tiempo diferente. Quiero ser defensora de las mujeres para que sean capaces de contar su verdad”, finalizó.