El rector de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), Alfonso Esparza Ortiz, entregó reconocimiento a Carlos Romero Aranda, procurador fiscal de la federación, quien presentó la ponencia Política Fiscal Penal del Estado Mexicano.
“En los grupos criminales hay uno que estamos investigando hay uno que opera en uno de los cárteles más importantes del del país, entonces si es un grupo de defraudación, de desvío de recursos públicos, pero tiene que ver también el crimen organizado y así es como esperaban y cómo van de la mano. Así es esta relación entre los tres y yo pondría una más, lavado de dinero, porque aquí tenemos evasión, lavado de dinero, corrupción y delincuencia organizada”, detalló el procurador.
Este viernes 28 de mayo, en el Salón Barroco del Edificio Carolino se efectuó la transmisión en vivo, a través de redes sociales, donde Esparza Ortiz reconoció la trayectoria de Carlos Romero Aranda, procurador fiscal de la federación, debido a que cuenta con una visión humanística, por su labor contra la defraudación fiscal organizada y en favor de los derechos laborales.
En sesión de preguntas, se le cuestionó al ponente que cuál era el panorama en México respecto de los comprobantes que amparan operaciones inexistentes o simuladas; en respuesta, Romero Aranda destacó que en México el no pagar impuestos, se da el cambio de la cultura fiscal, por tanto, existieron grupos que crecieron y se fomentaron para no pagar impuestos.
Tal es el caso del conocido esquema de Outsourcing el cual apareció en los años dos mil, por dos grupos, uno que era de Oaxaca y el otro de Chiapas; quienes te aconsejaban que no pagaras impuestos y cuotas de Seguridad Social para que a cambio constituyeras una cooperativa para que a los trabajadores los hicieras socios. “Esos fueron los primeros esquemas de defraudación fiscal que tenía que ver con trabajadores”.
Posteriormente se aconsejó ya no abrir cooperativas sino abrir sociedades de responsabilidad limitadas, sociedades de comandita simple, o un tipo de dominación especial; hasta que fueron evolucionando y llegaron a las facturaras.
“Cuando entra en vigor la factura electrónica, se vuelve un boom, por un lado, porque es mucho más sencillo desde tu computadora expedir un comprobante, te hacen el traspaso a tu cuenta y el mismo día puedes hacer toda la operación, y por otro lado el que se fomentaran estas operaciones desde el gobierno y que no se persiguiera. Yo no puedo entender estos grupos crimínales, no puedo entender cómo crecieron los factureros si no es que es con la complicidad de las autoridades fiscales”, enfatizó.