Los principales monumentos de París, una de las ciudades con mayor número de turistas en el mundo, cerrarán este sábado como medida de seguridad ante los temores a un estallido de la violencia en las protestas de los chalecos amarillos contra el alza de impuestos al carburante.
Después de que este jueves anunciaran el cierre de la Torre Eiffel, la Ópera de París y el Grand Palais, el Centro de Monumentos Nacionales (CMN) informó de que lugares tan emblemáticos como el Arco del Triunfo o las torres de la catedral de Notre Dame harán lo mismo.
En un breve comunicado, la dependencia señaló que siete de los sitios que gestiona en la capital cerrarán sus puertas.
Entre los monumentos incluidos en esta medida están, además de los mencionados, el Panteón, la Sainte Chapelle o el Palacio Real.
París ha decidido blindarse ante la posibilidad de que las manifestaciones no autorizadas que han sido convocadas por el movimiento de los chalecos amarillos para este sábado por toda Francia puedan derivar en un estallido de violencia y disturbios, como ya sucedió el pasado sábado.
El Primer Ministro francés, Édouard Philippe, anunció este jueves una movilización excepcional de 89 mil agentes de las fuerzas del orden ante las protestas, de los cuales 8 mil estarán en París.
La Prefectura de Policía de París recomendó a los comerciantes de la zona de los Campos Elíseos, que incluye tanto esa avenida como las calles adyacentes, que cierren sus puertas y accesos.
Asimismo, ha urgido a quitar de los lugares sensibles material de obras u otros elementos que podrían servir como proyectiles.
El aviso pide, además, proteger los establecimientos de eventuales daños con paneles en los escaparates o recoger sus terrazas y todo objeto vulnerable.