En la sesión de este miércoles, se dio a conocer un pronunciamiento de las comisiones de Relaciones Exteriores y de Relaciones Exteriores América del Norte, por el que manifiestan su rechazo a la propuesta de dos legisladores republicanos de Estados Unidos, para declarar terroristas a las organizaciones criminales de México y, por consiguiente, hacer uso de sus fuerzas armadas en nuestro territorio.
De acuerdo con el documento, estos órganos legislativos, que presiden el senador Héctor Vasconcelos y la senadora Gina Andrea Cruz Blackledge, manifiestan el tajante rechazo para dicha propuesta impulsada por los congresistas estadounidenses Dan Crenshaw y Michael Waltz.
En el documento se precisa que una medida de tal magnitud, en caso de ser aprobada, sería una inaceptable violación de la soberanía y la independencia de México, y negaría las soluciones diplomáticas y pacíficas que han caracterizado la relación entre ambos países en décadas recientes.
Las y los senadores reconocieron que hay problemas de seguridad en diversos territorios de nuestro país, así como el gran problema de salud pública y comercio de armas que tienen en Estados Unidos.
Precisaron que existen ciertas características de las sociedades altamente desarrolladas, tales como la desintegración familiar, el aislamiento individual, el vacío existencial y la disponibilidad de armas que inducen conductas antisociales como la violencia indiscriminada y el consumo de drogas y alcohol.
“Si en algunos países se da la producción de enervantes es porque existen países con gran capacidad de consumo de éstos. No habría productores si no hubiese consumidores”, se subraya.
Aseguraron que se debe replantear el combate a la drogadicción y contemplar la posibilidad de regular los estupefacientes, dado que las estrategias convencionales han mostrado su fracaso.
También exhortaron a los Gobiernos de ambas naciones a replantear las metas que se han acordado bajo el Entendimiento Bicentenario, con el fin de cooperar y aplicar la ley de manera más efectiva, reducir la adicción a las drogas y sus daños colaterales, así como las causas subyacentes de la violencia y las adicciones, todo ello en un marco de respeto irrestricto a la soberanía de cada país y los derechos humanos.
Finalmente, hicieron un llamado a los congresistas norteamericanos, así como a gobernadores y funcionarios públicos de ese país, a abstenerse de usar y beneficiarse de problemas reales que ambas naciones padecen, y a no lucrar políticamente con ellos para fines electorales locales.
“Cooperación sí; intervencionismo no”, puntualizan en el pronunciamiento las y los senadores.
Al respecto, el senador Héctor Vasconcelos, de Morena, señaló que el origen de este pronunciamiento se dio en las comisiones unidas citadas, “pero es bueno que quede de manifiesto que hay ciudadanos y ciudadanas que se oponen a que México reclame su soberanía”.
En tanto, el senador Julen Rementería del Puerto, del PAN, acusó que el pronunciamiento pretende representar a todo el Senado y no sólo a dos Comisiones. “No es verdad que mi Grupo Parlamentario apoye ideas que tienen que ver con invasiones. No mientan a México por quedar bien con el Presidente de la República”.
A su vez, el senador Germán Martínez Cázares, del Grupo Plural, dijo que no se debe usar el recurso del “anti norte-americanismo”, para cubrir nuestros propios desafíos como gobierno, ya que son nuestros socios, son parte de nuestra identidad y cultura mexicoamericana.
Foto: Senado