El Complejo Regional Nororiental, el más grande de los cinco que existen en la BUAP, con más de 3 mil alumnos, suma esfuerzos para que los estudiantes reciban una formación integral cerca de sus lugares de origen. De esta manera, acorta distancias y permite acceder a la educación, aseguró el rector Alfonso Esparza Ortiz, tras presidir el Primer Informe de Labores de José Alberto Ortega Balderas, director de esta unidad académica.
Además de ofertar 10 programas de licenciatura en diferentes sedes, este complejo cuenta con preparatorias en Teziutlán, Tlatlauquitepec, Libres y Cuetzalan, las dos últimas en el nivel II del Padrón de Buena Calidad del Sistema Nacional de Educación Media Superior. De esta manera, la Institución genera un crecimiento exponencial en los cinco municipios que integra esta unidad académica: Teziutlán, Tlatlauquitepec, Libres, Cuetzalan y Zacapoaxtla.
“La idea de generar los complejos regionales fue cohesionar el tema académico. Teníamos las sedes dispersas y sin esfuerzos coordinados. Con la transformación en complejos regionales, ahora se tiene un Consejo de Unidad Académica y generan cuerpos académicos para actualizar programas de trabajo. Lo anterior, eleva la calidad y presencia de la Universidad al interior del estado”, destacó.
Al celebrar los avances del último año, presentados por su director Ortega Balderas, el rector Alfonso Esparza confirmó su compromiso de brindar los mismos espacios y condiciones que existen en la capital del estado. Muestra de ello es la puesta en servicio de un nuevo edificio en la sede Libres, con aulas completamente equipadas; la adquisición de mobiliario e infraestructura para la nueva preparatoria de Tlatlauquitepec; la ampliación de la conexión a internet en Zacapoaxtla, Libres y en la preparatoria de Teziutlán, en este último municipio además se entregaron siete unidades dentales.
Asimismo, se otorgaron 23 nuevas plazas, 64 definitividades y 15 promociones. Dado que la columna vertebral de la Institución radica en sus docentes, se continuarán realizando estos ejercicios transparentes, subrayó.
Con estas acciones, el Complejo Regional Nororiental será un espacio en el que la población encuentre respuestas a sus necesidades. “La Universidad está atenta a las peticiones de la sociedad, que es a quien nos debemos”, expresó.
A través de un video, José Alberto Ortega Balderas dio cuenta de una demanda creciente en los niveles medio superior y superior; la conformación de dos grupos de investigación; el impulso a la capacitación docente y al acompañamiento universitario, con la participación de 122 docentes, 117 lobomentores, cinco mentores certificados y 40 universitarios en capacitación para este fin.
Informó sobre la realización de jornadas de atención en escuelas del nivel básico y medio superior, en educación postural, cuidado de la salud bucal y atención a niños con capacidades diferentes. También se desarrollaron proyectos que reforzaron las actividades académicas y administrativas. El objetivo del Complejo Regional Nororiental, dijo, es ser una unidad académica con trascendencia educativa.