A decir del técnico del Puebla de La Franja, Nicolás Larcamón, el equipo se concentra de lleno en su próximo juego frente al Necaxa, conscientes de que el rival en turno tiene las mismas aspiraciones que ellos de meterse a la liguilla, por lo que para los Camoteros no hay otra más que pelear para poco a poco lograr su cometido.
«No estamos esperando los cinco partidos, vamos a ir uno a la vez, hoy con el foco ciento por ciento en Necaxa, sabiendo que es un rival que está compitiendo por las mismas aspiraciones que tenemos nosotros, así que el enfoque está puesto en este primer partido, sabiendo obviamente que inmediatamente se van a venir una seguidilla de dos partidos más en la misma semana pero el foco tiene que estar ciento por ciento centrado en el siguiente partido, vamos a ir así atacando un partido a la vez, con la convicción de hacer muy bien las cosas y hacer la puntuación necesaria que nos clasifique a estar entre los doce que clasifican a las finales del torneo».
Larcamón anticipó que si se logra la consigna de meterse entre los doce primeros de la clasificación, serán un rival sumamente incómodo para quien los tenga que enfrentar, de ahí que tiene muy claro cuál es el camino a seguir, comenzando este fin de semana en su visita a territorio hidrocálido.
«Estamos asumiendo y en conciencia de que para nosotros es muy importante volver a lograr una clasificación, porque estamos muy claros en que una vez adentro nosotros somos un equipo muy incómodo para cualquier rival que nos toque y podemos lograr llegar a instancias decisivas nuevamente, por eso la ambición está puesta en puntuar lo necesario para clasificar en la mejor ubicación posible, después será matar o morir en esos cruces en los cuales nos sentimos muy a gusto y que sabemos que somos capaces de todo».
Asimismo, aclaró que lo dicho al término del juego anterior con relación al arbitraje fue sólo un comentario, ya que no ha sostenido plática aún con los integrantes de la comisión responsable, de ahí que su mente se centra de lleno en lo que está por encarar y no en ninguna otra cuestión.