Equipos intersecretariales desarrollaron cinco preprototipos para atender las necesidades de municipios en situación de riesgo medioambiental. Su implementación deberá ocurrir en los siguientes meses.

Luego de 10 meses de trabajo, la fase uno del proyecto Puebla resiliente ante desastres llegó a su fin. Se trata de una iniciativa bipartita entre el Gobierno estatal de Puebla y el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), a la cual la Ibero Puebla se sumó como prestadora del programa de formación Gobernanza del riesgo para un desarrollo resiliente.

En presencia de los más de 40 funcionarios públicos que participaron en el curso, Lilia Vélez Iglesias, directora general Académica de la Universidad Jesuita, agradeció al PNUD por la confianza en la Casa de Estudios como facilitadora de conocimientos. “Hoy más que nunca, las obras encomendadas a la Compañía de Jesús en México reiteramos nuestro compromiso por encontrar soluciones a los problemas que vivimos”.

Gobernanza del riesgo para un desarrollo resiliente proporcionó a los participantes herramientas y habilidades teórico-prácticas para profundizar conocimientos sobre la gestión del riesgo de desastres, cambio climático, género, innovación urbana, inteligencia colectiva y políticas públicas.

De acuerdo con la Lic. Norma Angélica Sandoval, subsecretaria para la Gestión del Territorio y Desarrollo Urbano de la SMADSOT Puebla, el proyecto va más allá de la prevención de desastres: se busca encontrar nuevas formas de comprender el riesgo ambiental como un asunto que compete a todas las áreas de la administración pública.

Por su parte, Edgar Rafael González González, oficial nacional de Programas de Ambiente, Energía y Resiliencia del PNUD México, enfatizó la importancia de construir nuevas dinámicas de gobernanza que señalen las responsabilidades de cada actor social en el cuidado de la casa común.

El programa de formación, que transitó de lo virtual a lo presencial, contó con 30 ponencias de expertos de México, España, Argentina y Perú, cuyas cátedras sumaron un total de 36 horas de cátedra a distancia. Posteriormente, los participantes tuvieron 13 horas de trabajo práctico en el Laboratorio de Innovación Económica y Social (LAINES) de la Ibero Puebla.

Según detalló la directora de este espacio, Marcela Ibarra Mateos, el grupo construyó una definición integral de la problemática que se buscaba atajar. Posteriormente, se articularon equipos intersecretariales para consolidar la transversalidad del impacto ambiental, los cuales identificaron a los actores sociales que se ven impactados por la gobernanza territorial.

El desarrollo de propuestas arrancó a partir de una metodología de innovación centrada en las personas, eje rector del LAINES. Una lluvia de ideas permitió obtener los primeros esbozos de solución de problemáticas específicas, mismas que derivaron en cinco preprototipos relacionados con recolección pluvial, viviendas vulnerables o irregulares, cambio climático y género y gestión de residuos.

De acuerdo con el balance de Beatriz Manrique Guevara, secretaria de Medio Ambiente, Desarrollo Sustentable y Ordenamiento Territorial de Puebla, el proyecto contribuye a que los tomadores de decisiones adopten la variable del riesgo dentro de los planes de desarrollo territorial.

La pertinencia de virar hacia nuevas formas de planeación tiene especial relevancia en Puebla y en todo el país. De acuerdo con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED), entre 2000 y 2020 se registraron pérdidas de 576,000 millones de pesos por desastres ambientales, así como la muerte de 2,500 personas. La OMS asegura que por cada peso que se invierte en prevención de desastres se ahorran 10 más en reconstrucción.

Es por ello que el director del CENAPRED, el Ing. Enrique Guevara Ortiz, aseguró que el objetivo final de Puebla resiliente ante desastres es lograr un territorio seguro, resiliente y sostenible. “Este ejercicio será una referencia que animará a otras entidades a sumarse a estos esfuerzos”.

Previo al brindis de honor, Sandra Sosa, representante residente del PNUD en México, se congratuló por que el evento congregara a personas cuya experiencia y disposición permite tener una visión integral de los fenómenos socioambientales. “Esta amplia participación ha permitido visibilizar la presencia de liderazgos institucionales”.

Los equipos interdisciplinarios artífices de los preprototipos gestados en el LAINES pertenecen a los sectores de medioambiente, salud, educación, protección civil, pueblos originarios, igualdad sustantiva, infraestructura, ciencia y técnica, planeación, desarrollo agrario y territorial. También fueron capacitados representantes de colegios profesionales de arquitectos e ingenieros y de las cámaras de empresas de la construcción de Puebla.