“El origen de la ciencia”, “Indígenas de la nación” y “Cuba sin Fidel”, entre las sugerencias

“El origen de la ciencia”, una antología de “La ciencia para todos”, con presentación de Jorge Flores Valdés, nos recuerda que toda historia tiene un inicio. Se puede decir que “La ciencia para todos”, colección de divulgación científica, comenzó tal como el Universo: Con una enorme explosión de obras, autores y lectores.

En este volumen, que festeja la publicación de 250 títulos, se compilan 25 fragmentos de la colección con un tema en común: el origen. El primer instante, el comienzo de la vida, el surgimiento del ser humano y el nacimiento de la conciencia, así como el origen de la ciencia misma, son algunos de los temas que los investigadores han tratado de resolver.

La antología incluye fragmentos de obras publicadas a lo largo de 30 años en sus 11 áreas temáticas, cuyo eje transversal es la cuestión del origen. Se trata, consecuentemente, de una invitación a iniciarse en el pensamiento científico y a continuar con la lectura de cada trabajo, que ahora los autores comparten para abrir en el lector la curiosidad científica.

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“Indígenas de la nación”, de Paula López Caballero, es una publicación con el subtítulo de “Etnografía histórica de la alteridad en México (Milpa Alta, siglos XVII-XXI)”, que explica los procesos a través de los cuales una persona o un grupo son identificados como indígenas, en tres momentos diferentes en México, desde el siglo XVII hasta el presente.

A partir de una etnografía histórica realizada en Milpa Alta, una zona rural de la Ciudad de México hoy reconocida como Pueblo Originario, se demuestran dos ideas clave. Una, que la categoría “indígena” ha variado de significado con el tiempo: Los marcadores de alteridad que la identifican en algún momento, dejan de ser operativos en alguno otro.

Y dos, que el proceso de formación estatal y nacional es vital para entender cómo se van fijando ciertos contenidos y características a esta forma de identificación, pues, lejos de actuar sobre grupos claramente constituidos, el Estado es determinante en su definición. Esta es una reflexión que parte de una observación minuciosa de las dinámicas sociales.

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“Cuba sin Fidel”, de Julio Patán, hace constar que por más de 50 años esa nación no se entendió con la figura de Fidel Castro, el líder revolucionario que instauró ahí una forma de gobierno basada en su personal percepción del mundo, por lo que su muerte en 2016 abrió la puerta a muchas dudas sobre qué venía en el presente y el futuro para la isla.

Este libro es el resultado de un viaje que realizó Patán por ese país que cautivó a América Latina, y de manera muy especial a México, por los lazos que crearon desde los albores de la Revolución Cubana de 1959. El autor hace un análisis que permite colocar a Cuba en un sitio justo, lejos de las filias y las fobias que le acompañaron mientras vivió Castro.

Fue en noviembre de 2016 cuando murió el Comandante Fidel y al conmemorar el primer aniversario de su fallecimiento, el autor viajó a ese país para asomarse a los cambios que se han registrado en la capital cubana, con la serie de tiendas de marca que despiertan los sueños de los isleños, para quienes hacer compras en esos locales resulta casi una utopía.

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“Dios es joven”, es la consecuencia literaria de la amplia conversación sostenida entre el papa Francisco y Thomas Leoncini. En ese memorable encuentro, el Pontífice reiteró una vez más que las jóvenes generaciones de hoy son protagonistas de la historia común, al sustraerlas de los márgenes a las que han sido relegadas durante demasiado tiempo.

En el diálogo valiente, íntimo y directo con Leoncini, Francisco se dirige no sólo a los jóvenes de todo el mundo, de dentro y de fuera de la Iglesia, también a los adultos que por diversas razones desempeñan un papel educativo y de granes guías en la familia, en la escuela, en el ámbito laboral, en el asociacionismo y en las instituciones más diversas.

Sus reflexiones afrontan con fuerza, sabiduría y pasión los grandes temas de hoy, de los muy íntimos a aquellos más ligados a la esfera social y pública, mezclando los recuerdos personales, anotaciones teológicas y reflexiones puntuales y proféticas, sin sustraerse a ninguno de los desafíos de la contemporaneidad. No es una obra religiosa, sino de vida.

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“Más oscuro”, de E. L. james, es una suerte de “Cincuenta sombras” ahora contada por “Christian Grey 2”; aunque aquella relación acabó marcada por el sufrimiento, Christian Grey no logró quitarse a “Anastasia” de la cabeza ni del corazón. Decidido a recuperarla y a amarla aceptando sus condiciones, reprime su necesidad de tenerlo todo bajo control.

Sin embargo, las pesadillas de la infancia no dejan de perseguirle y, además, el insidioso jefe de “Ana”, “Jack Hyde”, la quiere para él. La pregunta es ¿Podrá el doctor “Flynn”, psicólogo y confidente de “Christian”, ayudarle a enfrentarse a sus propios fantasmas, o acabarán la maestra “Elena” y “Leila”, llevando irremediablemente a “Grey” al pasado?

Consecuentemente, el lector que ha seguido esta historia desde sus primeras entregas se preguntará con justificado asombro que si finalmente consigue recuperar a “Ana”, ¿será capaz, un hombre tan oscuro y lastimado, de retenerla a su lado? Lo cierto es que James vuelve a sumergir a sus seguidores en el torbellino del universo de “Cincuenta sombras”.