Helicópteros descargaron miles de litros de agua este miércoles sobre partes altas del puerto de Valparaíso para terminar de apagar incendios forestales que entre el martes y hoy arrasaron con más de un centenar de viviendas.
Decenas de habitantes de los cerros Rocuant y San Roque removían escombros de las que fueron sus viviendas y pedían palas, máscaras, guantes y agua para asegurarse de que un rebrote no reavive las gigantescas llamas que consumieron sus hogares.
Un par de incendios forestales, que se registraron uno tras otro ayer y al amanecer de este miércoles, avanzaron sobre barrios de los cerros Rocuant y San Roque, destruyendo más de 120 viviendas ubicadas en la parte alta y en las quebradas de los cerros.
Hasta el momento no información oficial sobre víctimas.
«Acá no hay grifos y las casas se quemaron sin que nadie pudiera hacer nada… se quemó mi casa y la de mi sobrina, que la había inaugurado hace un mes», relató César, un vecino afectado.
Fuertes ráfagas de viento avivaron las llamas que se movieron de un lado a otro de las calles, dejando sólo escombros y humaredas.
Las autoridades del puerto creen que los incendios fueron intencionales.
«Todavía no tenemos la certeza, pero todo indica que el incendio de ayer fue intencional, y se inició en un sector bastante cercano a las casas», dijo Ezio Passadore, encargado de Emergencias del Municipio de Valparaíso.
Los barrios de la parte alta y de las quebradas de los cerros afectados nacieron de ocupaciones ilegales de terrenos. Algunos no poseen agua corriente ni alcantarillado y son abastecidos por camiones cisterna un par de veces por semana.
El último mes la parte alta de Valparaíso ha sido afectada por varios incendios forestales, durante la peor sequía que afecta Chile desde que se mantienen registros.
El peor siniestro se registró en abril de 2014, cuando murieron 15 personas, 2 mil 200 viviendas fueron arrasadas y más de 10 mil fueron desplazadas.