Miles de personas se congregaron de forma pacífica en distintos puntos de Estados Unidos para protestar contra la violencia policial hacia la población afroamericana y los grupos minoritarios. En muchas ciudades los manifestantes quebrantaron los toques de queda.

La ciudad de Washington fue el principal escenario de las protestas de este sábado. Según informó CNBC News, miles llegaron al Monumento a Lincoln, cerca de la Casa Blanca. Aunque se esperaban más de 200 mil asistentes, el presidente, Donald Trump, celebró en su Twitter que el número de manifestantes fue menor.

“Mucho menos gente en Washington D.C. de lo previsto. La Guardia Nacional, el Servicio Secreto y la Policía han estado haciendo un trabajo fantástico. ¡Gracias!”, comentó el mandatario en sus redes sociales.

Los estadounidenses también se manifestaron en Los Ángeles, San Francisco, Chicago, Filadelfia, Denver, Nueva York, Búfalo, San Francisco y Seattle, así como en decenas de ciudades más.

En Minneapolis, donde comenzó el descontento social, los manifestantes se dirigieron hacia la casa del alcalde Jacob Frey para gritar consignas en su contra. Según narra el diario The New York Times, se escuchaban sentencias como “¡Ve a casa Jacob, ve a casa!

Mientras tanto, los manifestantes en San Francisco bloquearon el emblemático puente Golden Gate, en tanto que en ciudades como Los Ángeles y Nueva York, la multitud rindió homenaje a la población afroamericana al visitar parques y centros académicos considerados núcleos de este sector poblacional.

Ésta es la doceava noche en que la población estadounidense sale a las calles bajo un mismo lema: «Black lives matter» y para exigir justicia por George Floyd, quien falleció después de que un policía de Minneapolis, aprisionara su cuello durante más de ocho minutos hasta causarle la muerte.