El vocero del Partido Acción Nacional (PAN), Fernando Herrera Ávila, consideró que antes de cobrar impuestos a quienes están en desventaja en el mercado laboral, el gobierno debería crear las condiciones para que, por esos impuestos tengan acceso a la salud pública, programas de retiro y prestaciones de otro tipo.

Consideró que retener el Impuesto Sobre la Renta (ISR) a los meseros con tal de conseguir dinero vía impuestos para destinarlo a obras nacidas del capricho, como la refinería de Dos Bocas, en Tabasco, es “injusto e inhumano”.

«El gobierno está tan desesperado por conseguir dinero para sus elefantes blancos que, a partir de abril pasado, el SAT (Servicio de Administración Tributaria) presiona a los patrones de fondas, cafés y bares para retener a los meseros el impuesto (ISR) por las propinas que reciben», expuso el vocero panista en un comunicado.

En su opinión, la actual administración hace todo para acentuar la desigualdad, pues por un lado recorta presupuesto a los servicios de salud pública y, por otro, cobra impuestos a quienes no pueden acceder a ella y deben pagar de su bolsa cualquier atención médica que requieran.

Manifestó que exprimir a todos, incluidos los más pobres, para que el presidente Andrés Manuel López Obrador entregue las dádivas, en actos masivos, a sus clientelas electorales “es una medida típica del populismo y de las dictaduras”.

Al respecto, el SAT aclaró en sus redes sociales que las gratificaciones percibidas por los trabajadores siempre se han considerado como parte de su salario, por lo que deben ser consideradas por el empleador para el cálculo y retención del ISR.

Recordó que desde 1993 la autoridad hacendaria analizó esta medida y lo dio a conocer en un oficio, y en 2019, en el Anexo 7 publicado el 30 de abril en el Diario Oficial de la Federación se volvió a publicar el mismo criterio sin cambio alguno, pues sigue siendo vigente.