Debido a que durante marzo, abril y mayo es frecuente que, en el Valle de México, sistemas de alta presión generen estabilidad atmosférica, con días despejados, altas temperaturas, baja humedad y vientos escasos, se prevén condiciones favorables para una mayor concentración y una escasa dispersión de contaminantes en la región.

Así lo informó la coordinadora general del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Alejandra Margarita Méndez Girón, durante la conferencia de prensa “Acciones para la Temporada de ozono 2023”, encabezada por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, y las secretarías del Medio Ambiente de la Ciudad de México y del Estado de México.

La titular del SMN detalló que las influencias de sistemas de alta presión sobre el Valle de México provocan subsidencia en niveles medios de la atmosfera y escasa humedad.

Refirió que la subsidencia son corrientes de vientos secos descendentes de la atmósfera alta y media hasta la superficie, lo cual es un factor que inhibe la formación de nubes y, consecuentemente, de lluvia, lo que provoca el incremento en la concentración de ozono cerca de la superficie, debido a que no permite que los contaminantes se dispersen en la atmósfera y queden atrapados en la baja tropósfera.

Ante dichas condiciones, subrayó, es de especial importancia la vigilancia de los incendios forestales, que se realiza mediante imágenes de satélite.

Destacó que, con el fin de contribuir a detectar las áreas con riesgo de conflagraciones de manera más oportuna, el SMN trabaja de manera coordinada con la Comisión Nacional Forestal. Asimismo, elabora el producto llamado Acumulado de Peligro Meteorológico para Incendios, el cual se basa en el análisis de las regiones con altas temperaturas, condiciones de sequía y vientos, factores fundamentales para que se originen y dispersen las conflagraciones.

Por otra parte, con imágenes satelitales, se identifican las concentraciones de partículas en la atmósfera, como son los aerosoles o la ceniza volcánica.

En cuanto al pronóstico trimestral para la Megalópolis, dio a conocer que en marzo próximo se esperan temperaturas máximas de hasta 2 grados Celsius menos cálidas que las cifras históricas de este mes, en Morelos.

Por el contrario, temperaturas máximas más cálidas se prevén en el centro y sur del Estado de México, la Ciudad de México, el norte y el occidente de Tlaxcala, el norte y el sur de Puebla, en Hidalgo y Querétaro.

Para abril, se pronostican temperaturas hasta 2 grados Celsius menos cálidas que lo habitual en Morelos; al contrario, más cálidas en el Estado de México, Ciudad de México, norte y centro de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Querétaro.

En mayo se esperan temperaturas máximas 1 grado Celsius menos cálidas que lo registrado habitualmente en esta época en Morelos y el norte de Puebla.

Finalmente, temperaturas máximas más cálidas se estiman en el centro y el sur del Estado de México, en la Ciudad de México, el norte de Puebla, en Tlaxcala, Hidalgo y Querétaro.