Los empleados de la Delegación en Puebla del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) viven horas de angustia, luego de que el sábado pasado se detectó el primer caso de Covid-19, al que siguió otro positivo más este miércoles, en el personal de las oficinas que se ubican en la Calle 3 Poniente número 1906, Colonia Amor.
Denunciaron que las autoridades no han asumido ninguno de los protocolos que recomienda la Secretaría de Salud del Gobierno de México.
Para prevenir más contagios, solicitaron que, como recomiendan las autoridades federales, se cierre la sede, se permita el teletrabajo desde casa, se saniticen las oficinas y se mantenga observación en los casos sospechosos, al menos por 15 días. No han tenido respuesta.
Las de Administración y Médica “son las que deben apoyar en los protocolos y no apoyaron en nada”, además de que la primera “no suministró los aditamentos necesarios para que el personal estuviera cuidado”. dijeron, tras solicitar el resguardo de su identidad, para prevenir represalias.
El sábado pasado, se detectó el primer caso de una persona contagiada, quien estuvo de guardia la semana pasada.
Ante la aparición de varios síntomas, “le realizaron la prueba el sábado 13 de junio y salió positiva… tenía fiebre el viernes, pero aun así la subdelegación médica no realizó ningún protocolo para el cuidado del personal”.
Derivado de ese primer contagio, este miércoles por fin se realizaron pruebas rápidas, las que arrojaron otro positivo más, en la misma área del anterior.
Las dos personas, como el resto del personal que ha seguido laborando en guardias, estuvieron en contacto con muchos de sus compañeros.
Del personal de la esa dependencia en Puebla, solamente la Subdelegación de Prestaciones atiende al público en general, en un promedio de hasta 100 personas diariamente, aclararon.
Foto: Es Imagen / Jafet Moz