El jugador de los Texans de Houston, Kenny Stills, fue arrestado durante una protesta contra el racismo a las afueras de la casa del fiscal de Kentucky, Daniel Cameron.

Alrededor de 100 personas fueron detenidas con cargos de allanamiento criminal, conducta desordenada e intimidación a un testigo.

El objetivo de la protesta es crear una reforma policial, luego del asesinato de Breonna Taylor, de 26 años, a manos de agentes narcóticos.

Luego de la muerte de Taylor, en marzo pasado, sólo uno de los tres oficiales que dispararon fue detenido, aunque ninguno fue acusado penalmente.

Kenny Stills es una de las figuras del deporte que se ha manifestado a favor del movimiento Black lives matter. (Con información de La Razón)