Un fragmento del trabajo fotográfico de Ana Cecilia Parrodi Anaya, egresada de la Universidad de las Américas Puebla, formó parte de un workshop sobre arte, política y resistencia que se expuso en el Museo Nacional Británico de Arte Moderno, Tate Modern; uno de los recintos de exhibición más importantes del Reino Unido y de talla mundial.
Tomando un curso en la Universidad de Kent en Inglaterra, una de las actividades era mandar una fotografía de lo que significa la resistencia política, social o ecológica para los participantes. La egresada de Diseño de Información Visual por la UDLAP eligió esta última opción gracias al gusto por la naturaleza y su motivación fue encaminada hacia la tala de árboles, pues ellos albergan a muchas especies importantes para el ecosistema, incluyendo al ser humano y pese a reconocer la trascendencia del problema se sigue explotando ese recurso.
“La imagen fue tomada en este campus (UDLAP), porque hay un árbol donde se ve la viruta que cortaron. Invité a mi amiga a que posara, la vestí completamente de gris y le puse un cubre bocas porque no respiramos sin los árboles y, además, sin ellos el ambiente se contamina mucho. Lo importante era que estuviera arriba de un árbol ya muerto, haciendo una señal de resistencia”, explicó su concepto la egresada en 2014.
Luego vino el proceso de edición para después mandar la fotografía por correo. Días posteriores le dieron una respuesta satisfactoria, de que había sido seleccionada para exponerse en el Museo Tate para un workshop e iba ser la imagen principal de un mosaico integrado por otras fotografías, a fin de crear una imagen en común de lo que significa resistencia. “Muchas personas que tomaron el curso también mandaron sus imágenes y entonces todas hacen una”, detalló Ana Cecilia Parrodi.
Este inconmensurable logro se suma a la exposición de algunas fotografías realizada el año pasado en Wollaton Park, Nottingham, Inglaterra; a la de piezas de arte en el Museo de Irapuato y a otras tantas que ha tenido la egresada de la UDLAP. “Muy bonita experiencia de que mi imagen fuera la principal del mosaico y sobre todo que pusieran mi nombre, porque en el Tate pasan miles de personas a diario. Es un sueño hecho realidad porque yo quería hacer algo, lo que fuera, pero que estuviera en el Tate”, comentó.