El Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” (AIFA) no sólo logrará mejorar la conectividad del sistema aeroportuario nacional sino que, además, ayudará a mitigar la demanda que ahora tiene el aeródromo capitalino, así lo afirmó el diputado Marcos Rosendo Medina Filigrana.
“Me siento muy contento, muy feliz, muy honrado, de poder estar en un hecho histórico que marca al México del siglo XXI”, expresó el legislador federal desde el recinto aeroportuario.
El político tabasqueño colocó en sus redes sociales un video donde mostró parte de las instalaciones recién inauguradas, donde manifestó su beneplácito de la conclusión de esta primera parte de “tan majestuoso obra” a favor de todos los mexicanos.
“Esta es la zona de último abordaje, ustedes pueden ver restaurantes de cadenas conocidas; está listo para atender a todos las viajeras y viajeros que van a circular por este imponente y colosal aeropuerto.
“La puesta de operaciones de este aeropuerto es parte de una red aeroportuaria integral de la zona metropolitana que, junto con el Aeropuerto Internacional “Benito Juárez” de la Ciudad de México y el de Toluca, lograrán mejorar la conectividad del sistema aeroportuario nacional”, explicó.
El diputado federal por Tabasco recordó que, en marzo de 2018, como parte de su campaña, el presidente López Obrador propuso la utilización de los terrenos de la base aérea de Santa Lucía para convertirla en un aeropuerto internacional acorde con las necesidades de comunicación del México del siglo XXI, situación que ya es una realidad.
El también delegado político del Partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) en Puebla reconoció la labor de miles de ciudadanos que se sumaron a las labores que ejecutó el cuerpo de ingenieros civiles de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
“El aeropuerto, recordó, es una obra diseñada y coordinada por elementos de las Fuerzas Armadas de México que se congregaron en el Agrupamiento de Ingenieros «Felipe Ángeles», comandado por el ingeniero militar Gustavo Ricardo Vallejo”, explicó.
La nueva base aérea está compuesta, entre otros aspectos, “por una enorme torre de control que resalta entre las más de mil hectáreas destinadas para su construcción.
«Además, habrá dos pistas destinadas para vuelos civiles y una pista que será usada para operaciones militares. Habrá también una terminal a cuyas afueras habrá un mercado artesanal. Asimismo, Santa Lucía tiene en su interior un hotel, tres estacionamientos, la terminal de carga, así como los depósitos de combustible”, resaltó el legislador federal.