El actor Joaquín Cosío ha ganado fama de ser un hombre de carácter fuerte luego de que durante su carrera, y por sus características físicas, ha interpretado en varias ocasiones papeles rudos o de capos mexicanos como el famosos «Cochiloco» en la película «El infierno», de 2010.
Sin embargo, él asegura que siempre ha sido una persona noble y que incluso en su infancia era un niño muy tierno y consentido por sus tías, quienes se hicieron cargo de él luego de que sus padres murieran. Sin embargo, por la imagen que ha creado a partir de su trabajo varias veces ha tenido que enfrentarse a verdaderos narcotraficantes que se acercan a él.
«Me han mandado tequilas», afirmó Cosío en una entrevista para el canal de YouTube de Yordi Rosado.
Junto al director mexicano Luis Estrada en alguna ocasión se encontró en un restaurante con integrantes del crimen organizado, quienes quisieron convivir con ellos pensando que las interpretaciones del actor traspasaban la pantalla de forma natural.
«Nos llegaron las botellas y volteas y ya sabes… si parecen, son».
Durante su infancia vivió en distintas ciudades fronterizas por lo que es común que visite lugares como Ciudad Juárez y Mexicali, donde se encuentran ubicados algunos de los cárteles más peligrosos. Fue precisamente en el primer sitio donde vivió una de las experiencias más difíciles de frente a una persona que aparentó ser muy peligrosa.
«Un hombre que no lo voy a olvidar, un rubio muy bien vestido, muy elegante, se me acerca y me dice: ‘quiúbole’, en ese tiempo yo ni había hecho películas, traía una barbota negra y me agarró de la mano y me dice ‘¿qué pasó, cómo te va?’ y no me soltaba, luego se iba a la barra y regresaba: ‘qué pasó ya volví, aquí ando'», recordó Joaquín.
«A la tercera o cuarta vez yo ya estaba que me moría, temblando y ahí venía otra vez, le dije al amigo con quien estaba que nos fuéramos y me dice (el hombre rubio): ‘cuídate cuando cruces la puerta»’, contó el actor. «Es la única vez que comprobé que sí te tiemblan las rodillas», afirmó.
Desde 2018 ha dado vida al conocido narcotraficante Ernesto Fonseca Carrillo, mejor conocido como «Don Neto», en la serie «Narcos», pero lejos de lo que interpreta en la pantalla él asegura que siempre ha estado alejado de la droga, que incluso le han aventado en el baño cuando lo confunden o dan por hecho que está relacionado con este mundo criminal.
Aunque estos personajes le han dado fama también lo han obligado a escapar de ciertos lugares evitando tener relaciones con alguna persona peligrosa, pero el actor mexicano asegura que también ha disfrutado de hacer estos papeles que incluso le divierten.
«En un bar que se llama ‘Las 15 letras’ estábamos mis amigos y yo y llegaron unos jovencitos medio entrados (bebidos) se me acercaron y les dije ‘qué pasó’… es la frase más escalofriante que me han dicho: ‘nosotros somos los de a de veras'», recordó el actor, quien inmediatamente después de esta provocación se retiró del lugar.
El Universal