A ocho años del funcionamiento del sistema electoral, derivado de la reforma de 2014, “en México tenemos un sistema electoral fuerte, funcional, robusto y acreditado. Claro, no es sencillo; es un sistema profundamente complejo”, pero funciona bien, sostiene Lorenzo Córdova, ante la embestida de la 4T y su propuesta de reforma electoral; la cual, debe tener el máximo consenso de las fuerzas políticas.