El padre de familia es una imagen de fuerza, de seguridad emocional y de salir al mundo social de una manera muy importante, impulsa a los hijos y les brinda lo mejor que puede.

A 63 semanas de permanecer en casa por el confinamiento, los hijos han descubierto el potencial que representa cada uno de los miembros de la familia, tanto el padre como la madre, esa responsabilidad de proveer de lo necesario al hogar.

El padre de familia, quien representa la fuerza simbólica dentro del hogar, es una figura muy importante dentro del núcleo familiar, enfatizó Dulce María Pérez Torres, catedrática investigadora de la Facultad de Psicología de la UPAEP.

El padre es una imagen de fuerza, de seguridad emocional y de salir al mundo social de una manera muy importante, “el padre emocionalmente es muy importante en la relación con el mundo; y esto está comprobado por todos los estudios de terapia familiar, el trabajo de terapia de pareja, en donde se ve a la imagen masculina como un puente para lograr encontrarse con el mundo y que se viene reflejando en el mundo desde los años 60’s, para dedicar un día especial para el papá”.

Subrayó que “El Día del Padre” “es un momento especial para reflexionar sobre la importancia que ha tenido este personaje que algunas veces está en silencio en casa, pero que en ese silencio, también nos representa el mundo en cuanto a la responsabilidad y el mundo en cuanto al compromiso social, porque quiere lo mejor para su gente, aunque esté mirando el futbol o esté entretenido en algo. La gente puede rescatar más acciones positivas que negativas en el actuar de un padre de familia con sus seres queridos”.

Los padres de familia de alguna manera representan de manera simbólica el mayor aporte económico, al igual que las mujeres que hoy tienen que trabajar para complementar los gastos de la casa. “Agregó que el hombre tiene esa visión de ayudar y apoyar más en la parte económica que la mujer; mientras que la mujer ve en el gasto las cuestiones improntas, como es, por ejemplo, la comida, los zapatos y los gastos de la casa; mientras que el padre ve toda la infraestructura y la estructura de la casa, que necesita pintura, reparar algo, etc., él lo ve y lo visualiza en la parte económica”.

Advirtió que cuando el padre de familia se queda sin trabajo, pega directamente de forma emocional a todos los miembros de la familia. Y en ese sentido, dijo que ante las adversidades es importante permanecer unidos como familia, pues los seres queridos, como son los hijos y la pareja, siempre serán un gran apoyo para enfrentar las adversidades.

Señaló que en el caso del padre, en junio, en el mes de la crianza, la UNICEF ha propuesto que los padres tienen el trabajo más importante en el mundo. En especial porque antiguamente se veía a los padres que salían muy temprano de la casa y regresaban muy noche, “se iban y los hijos estaban durmiendo, regresaban a la casa por la noche y los hijos estaban durmiendo”.

Pérez Torres manifestó que un gran número de hombres dentro de los datos estadísticos que representan algunos datos de salud, señalan que esta enfermedad del Covid-19, se ha llevado consigo a más hombres que mujeres. “De acuerdo a estos estudios, señalan que los hombres no pudieron decodificar una enzima a diferencia de las mujeres y finalmente murieron por este virus.

Dijo que la muerte de algunos padres de familia durante esta pandemia, representa una pérdida muy importante al interior de las familias. Al señalar que los padres hacen malabarismos en el trabajo, en el cuidado de los niños, en el autocuidado de la casa, además de convivir en la vida familiar encerrada, porque no se puede salir a la calle como antes de la pandemia en los fines de semana, porque esta contingencia sanitaria, ha impuesto nuevos hábitos de salud para cada una de las personas.

Durante los tres primeros meses de confinamiento, la familia en la mayoría de los casos, tuvo que trabajar desde la casa, tuvo que establecer una nueva forma de convivencia entre ellos mismos y después de esos momentos de relación, los padres tuvieron nuevamente que salir a trabajar, porque no había de otra, no se podían quedar estáticos en la casa.

En la sociedad que se vivía antes del 23 de marzo de 2020, estaba insertada en una visión de hiperactividad, en donde era impresionante todo lo que hacíamos, y que por la pandemia, se vinieron a modificar todos los roles de los miembros de la familia y de la sociedad.

Alrededor de 70 semanas se le ha pedido a las personas que permanezcan en casa por la pandemia sanitaria y como consecuencia, ha provocado formar parte de una nueva vida, de configurar todas las actividades que se realizaban de manera presencial en la escuela, en el trabajo y que los miembros de las familias poco conocían de los roles que realizan los padres de familia en la casa, en el trabajo y los hijos en la escuela y esto ha rediseñado la forma de convivir al interior de los hogares.