Jesús Giles, dirigente estatal del PAN, demanda a las autoridades correspondientes esclarecer y castigar a los responsables del homicidio de Juan Pedro González a manos de un sobrino del candidato a la gubernatura de Puebla por la coalición “Juntos Haremos Historia”, Luis Miguel Barbosa Huerta.
“Me parece muy lamentable que la familia de alguien que pretende gobernar un estado mate a sangre fría a un hombre de familia, dejando huérfanos a cinco hijos; pero sobretodo me preocupa que los asesinos se escuden detrás del apellido de Barbosa para escapar de su castigo y burlar a las autoridades.
”No podemos permitir que familias así que con el simple hecho de ser familiar cercano del candidato de Morena comentan estos crímenes”, refirió el panista
Además, Giles Carmona, a nombre de Acción Nacional, exige todo el peso de la ley en contra de los sobrinos de Luis Miguel Barbosa.
Este día, el periódico El Sol de Puebla publicó como de cuatro impactos de arma de fuego, el pasado 8 de abril un obrero fue asesinado en una lonchería del municipio de Ajalpan, a manos de un sobrino de Luis Miguel Barbosa Huerta, candidato a la gubernatura de Puebla por la coalición “Juntos Haremos Historia”, acusaron familiares de la víctima, quienes temen que por el parentesco con el político, el caso quede impune ya que aseguran que la familia de los acusados alardea del peso que tiene el apellido Barbosa.
A decir de los deudos y según lo asentado en la carpeta de investigación 1061/2018/TEHUA, el autor material es Francisco Balderas Barbosa, alias “El Pancho Rata”, quien habría actuado en complicidad de su hermano Brandon Humberto con los mismos apellidos y un tercero identificado como Alfredo E.R., alias “El Cactus”, quienes están prófugos de la justicia.
En tanto, el hoy occiso fue reconocido por su esposa como Juan Pedro González, de 38 años de edad.
Quienes atestiguaron los hechos, comentaron a la policía que quien activó la pistola fue Francisco y que tanto el hermano de éste así como el sujeto apodado “El Cactus”, ayudaron a escapar al presunto homicida. A su vez, fuentes policiacas indicaron el agresor y la víctima, eran amigos, sin embargo por motivos no dados a conocer, terminaron en pleito de tal manera que sostenían viejas rencillas.
Sin embargo, la madrugada del 8 de abril del presente año, durante las festividades de carnaval en el Centro de Ajalpan, Francisco decidió terminar con la situación y herir de muerte a Juan Pedro, quien era obrero y padre de cinco hijos que hoy quedan en la orfandad.
De acuerdo con los reportes ministeriales el crimen se registró en el local denominado “Lonchería del Mercado”, el cual se ubica sobre la calle Rafael Ávila Camacho.
En este sentido, fuentes policiales aseguraron que la víctima era cliente del citado negocio y que aquel día entró en compañía de uno de sus hijos para comprar unos cigarros; en ese instante, tres sujetos en aparente estado de alcoholemia, se dirigieron hacia Juan para después agredirlo.
No conforme con lo anterior, uno de los tres acusados, es decir Francisco sacó su arma de fuego para luego dispararle en cuatro ocasiones. Juan, cayó herido por proyectiles de arma de fuego en cuello y espalda, según lo narrado por su mismo hijo.
“Le saltó por atrás, luego le metió un balazo acá (en el cuello), y luego, luego le metieron otros tres en la espalda. Íbamos para el hospital, no más me abrazó bien fuerte, medio un beso y se soltó, se quedó sin pulso” (SIC), narró el adolescente.
Mientras los atacantes huían de la zona, el hijo menor de la víctima gritó para pedir ayuda, de tal forma que el herido fue trasladado por sus propios medios, es decir en su mismo automóvil al hospital General de Ajalpan. Sin embargo, todo esfuerzo fue en vano ya que una vez en el área de urgencias, el médico de guardia confirmó la muerte del lesionado.
Ante lo ocurrido, se dio parte tanto a la policía del municipio como del estado, quienes acordonaron la escena del crimen hasta la llegada del personal de la Agencia Estatal de Investigación en la región de Ajalpan. Estos últimos procedieron a las diligencias del levantamiento de cadáver para dar inicio a la carpeta de investigación correspondiente. En tanto, la lonchería, donde también se comercializaban bebidas embriagantes, fue cerrada.