Pese a la excitante victoria de las Águilas de Filadelfia sobre los Patriotas de Nueva Inglaterra en el Súper Tazón LII, los niveles de audiencia en la televisión estadunidense muestran una caída, según cifras preliminares divulgadas hoy.
La primera victoria de las Águilas por 41-33 en el juego de campeonato de la NFL desde 1960 transmitida por la cadena NBC registró un rating de 47.4 puntos.
Esta cifra está ligeramente por debajo de los 48.8 puntos de la final del año pasado en que Patriotas vino de atrás para vencer a los Halcones de Atlanta, lo que daría al juego de este año el rendimiento más bajo en ratings desde el 2010, según los primeros reportes.
En el 2010 en la victoria de Nueva Orleans 31-17 sobre Indianápolis un total de 106,5 millones observaron el juego.
El declive, que pese a ello atrajo a una nada despreciable cifra de 111 millones de televidentes, llega luego de una temporada regular en la que los ratings de la liga cayeron en un 9.7 por ciento, lo que provocó especulaciones sobre si la indignación de algunos fanáticos por algunas protestas influyó.
No hay una razón especial para la caída, pero la mala programación en horario estelar al inicio de la temporada, y la controversia sobre los jugadores que se arrodillaron durante el himno nacional en protesta por la brutalidad policial contra afroamericanos, pudieron haber influido de acuerdo con el sitio especializado The Hollywood Reporter.
El Súper Tazón del año pasado (Patriotas 34–Halcones 28) atrajo a 111,3 millones de espectadores un declive muy leve comparado con los 111,9 millones del año anterior (Panteras 10-Broncos 24).
La edición del 2015 entre, Patriotas 28 y los Seattle Seahawks 24, atrajo a la audiencia televisiva más grande de la historia para este juego con 114,4 millones de espectadores.
Mientras tanto, el Súper Tazón es año con año el rey de los ratings de la televisión estadunidense y se estima que es visto a través del mundo por una audiencia de unos 600 millones de personas, no es el evento deportivo más visto a nivel mundial.
La final de la Copa del Mundo fácilmente supera al Súper Tazón, ya que más de mil millones de personas sintonizaron sus televisores para ver a Alemania vencer a Argentina en la final del 2014 en Brasil.