En México solo se vive una psicósis desmedida ante la confirmación de los primeros casos de contagio por Covid-19, consideraron turistas extranjeros al salir del país por el aeropuerto internacional de la capital.
Por ejemplo, María Monserrat, quien es originaria de España y se dispone a viajar a Madrid, relató a Notimex que en los últimos cinco días de su estancia le fue prácticamente imposible comprar un cubrebocas o gel antibacterial.
“Yo creo que hay un poco de paranoia, pero hay que ser prudentes”, manifestó en entrevista.
“Desde hace cinco días ha sido prácticamente imposible encontrar mascarillas ni toallitas antibacteriales, ni gel antibacterial”, expuso.
La española buscaba llevar estos insumos a Madrid, pero señaló que en algunas farmacias o en la calle estos artículos llegaban a cotizarse hasta en 3 euros, es decir unos 67 pesos.
Monserrat explico que por el momento ni ella ni su familia tomarán medidas extraordinarias para tratar de no contagiarse del virus, en parte, para no contribuir a una histeria colectiva entre sus vecinos y amigos.
“En principio no voy a tomar ninguna medida de precaución, o sea, las normales de higiene, salvo que los médicos nos indiquen lo contrario, pero en principio no habrá, no tomaré ninguna”, afirmó.
Por su parte, Hans Amundsen, un ciudadano danés que viaja al Londres desde el AICM, coincidió que detrás de las compras de pánico qué hay en México hay mucha desinformación.
“Creo que no es un juego el virus, pero pienso qué hay mucho temor y poca información sobre los cuidados y precauciones que debemos tener”.
“Creo que quienes deben tomar las medidas precautorias son las personas que tienen enfermedades crónicas, los de la tercera edad, la gente con afecciones pulmonares, ellos sin duda deben tener más cuidado”, señaló.
Por otro lado, Jerome Attoub, ciudadano francés que lleva consigo un cubrebocas N-95, y que viaja a París, relató que tras un viaje de un mes por el país, desde hace un día presenta un resfriado.
Sin querer alarmar, relató, tomó la decisión de protegerse ante un viaje de más de 12 horas para llegar a su destino.
Apuntó que portar cubrebocas es una medida de protección para los otros pasajeros que, comentó, están alarmados por la propagación del virus.
“Mira cuántos hay con cubrebocas, no lucen enfermos, pero lo único que hacen es alarmar a otros, a los mexicanos”, dijo.
-“¿Tú por que lo portas?, se le cuestionó.
-“Llevo un día con tos después de regresar de la playa, el médico me dijo que es un resfriado, opté por ponérmelo para no exponer a los demás, solo eso, no lo hago por el coronavirus.
-“Yo creo que tampoco hay que alarmarse demasiado, aunque no sabemos eh porque los chinos son comunistas y los comunistas son muy opacos, mienten mucho”, dijo en entrevista riendo.
Hasta el momento, autoridades sanitarias mexicanas han reportado la existencia de cinco casos de connacionales con la enfermedad.
Todos ellos representan contagios importados y ninguno tuvo origen en México.
Personal del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México portan cubrebocas y guantes, sin embargo no dan información sobre las medidas de precaución que se toman en el inmueble ante la presencia del virus.