Al cumplir 75 años, Naciones Unidas vive su “momento 1945”, dijo el secretario general, refiriéndose al año de fundación de la Organización al término de la Segunda Guerra Mundial y equiparándolo con la coyuntura actual, cuando el mundo se encuentra asolado por la pandemia de Covid-19, que se ha cobrado ya cerca de un millón de vidas.
En una conferencia de prensa previa al inicio del debate de alto nivel de la Asamblea General, la semana próxima, António Guterres pugnó por la unión internacional para encarar la emergencia sanitaria.
“De alguna manera estamos viviendo un momento semejante al de la fundación en 1945, ese año acabó la Segunda Guerra Mundial, pero ahora con el Covid-19 y las condiciones climáticas tenemos nuevamente una señal de alarma que indica que debemos unirnos para sumar nuestras capacidades y para -independientemente de las diferencias que existan y de la afirmación de la soberanía nacional, que todos reconocemos- buscar una gobernanza global más eficaz y conseguir una cooperación internacional que pueda responder a los enormes desafíos que enfrentamos”, explicó.
Guterres identificó al coronavirus como la mayor amenaza mundial a la seguridad y recalcó que aún se encuentra fuera de control.
Agregó que, al igual que en 1945, el mundo precisa estar a la altura del momento y mostrar un frente unido para resolver los problemas, “sean estos epidemias, alteraciones climáticas, riesgos acarreados por las tecnologías o peligros de una conflagración mundial que tendría consecuencias desastrosas”.
“Tenemos que mostrar unidad como jamás lo hemos hecho para superar la emergencia actual, hacer que el mundo vuelva a moverse, a trabajar y a prosperar, y debemos mantener la visión de la Carta de la ONU”, acotó.
“Por eso creo que las Naciones Unidas nunca fueron tan necesarias como hoy”, puntualizó el líder de la ONU, aceptando que la misión del organismo mundial no es fácil puesto que un virus tiene a la humanidad de rodillas, además de que se está perdiendo la guerra contra el cambio climático y hay amenazas nucleares y cibernéticas.
Para Guterres, en estas circunstancias “se torna claro que tenemos que ser humildes, reconocer nuestra vulnerabilidad y reconocer que nos tenemos que unir y ser solidarios para poder responder a estos desafíos”.
Insistió en que el coronavirus avanzó de una forma rápida y trágica porque en los países no hubo la capacidad de coordinar esfuerzos y reiteró que es la hora de trabajar unidos para responder de una forma efectiva y evitar que haya una segunda oleada de contagios que eche por tierra los avances conseguidos.
El Secretario General se refirió una vez más a los proyectos en curso para desarrollar una vacuna contra el Covid-19 diciendo que la inmunización debe ser “un bien público global” ya que el virus no respeta las fronteras.
“Necesitamos una vacuna asequible que esté disponible para todos, una vacuna de la gente”, enfatizó nuevamente.
Foto: ONU