Las personas durante las fiestas decembrinas pueden llegar a subir entre dos y tres kilos de peso por los alimentos y bebidas extras que consumen durante este periodo, además de que la activación física se ve reducida, señaló Lourdes Silva Fernández, Directora de la Facultad de Nutrición de la UPAEP.
“Durante diciembre y los primeros días de enero se registran muchos brindis, muchas posadas, por lo que se incrementa el peso de las personas en estas fechas, en donde también influye el factor de qué tan sociales son las personas para asistir a algunas fiestas o comidas en donde hay demasiados alimentos y bebidas azucaradas”, comentó Silva Fernández.
Cabe señalar que en la UPAEP se cuenta con las carreras de Nutrición y Fisioterapia en donde encontrarás especialistas que pueden orientar a las personas que tengan la necesidad de tener una dieta balanceada o bien, llevar adelante una revisión fisiológica para ver qué tan aptas están las personas para realizar alguna actividad física.
Abundó que el tema de las bebidas es importante, ya que aun cuando se tiene el consumo de alimentos muy energéticos, es decir, muy dulces o con bastante grasa, “las bebidas no nos causan saciedad en su consumo como sucede con los alimentos, alimentos fritos, o salados. En el caso de las bebidas, estamos consumiendo alcohol con refresco sin llegar a saciarnos y por consecuencia contribuyen también al incremento de peso en las personas”.
La gente siempre busca bajar de peso después de las fiestas decembrinas, periodo en el que se registra un alto consumo de diferentes alimentos, bebidas y se reducen las actividades físicas y cotidianas, se da más el sedentarismo.
Dijo que la Facultad de Nutrición de la UPAEP tiene aproximadamente tres años realizando estudios sobre el aumento de peso en las personas en algunas fiestas mexicanas, sin olvidar que en el plano internacional se han realizado estudios sobre el aumento de peso de la población y del tipo de ejercicios que realizan para intentar mantenerse saludablemente.
“En el caso de México, las fiestas son muy prolongadas, es decir, no sólo son las festividades de Navidad y año nuevo, sino que tenemos festejos como las posadas, el Día de la Virgen de Guadalupe, las fiestas con la familia y el trabajo, entre otros y en ese periodo la gente lleva a cabo el consumo de alimentos extras de los que normalmente consume”.
Acotó que para tener una alimentación saludable, las personas deben cuidar mucho lo que están comiendo durante el día, comenzando por el desayuno, que es algo primordial para una dieta balanceada y la energía necesaria para el cuerpo, y comer de manera apropiada al mediodía y por la noche, evitar en la medida de lo posible, estar comiendo durante todo el día cualquier tipo de alimento como frituras o bebidas endulzadas como jugos o refrescos que también contribuyen al aumento de peso. Lo recomendable es tomar agua simple, sin azúcar.
Por su parte, Claudia del Carmen Méndez Fuentes, catedrática y especialista en rehabilitación neurológica de la UPAEP, enfatizó que el ejercicio físico debe ser considerado como un hábito y que debe formar parte de la vida diaria de las personas.
“El ejercicio y la actividad física no debe realizarse por temporadas o cada vez que se registra un aumento en el peso de las personas, éste se debe realizar a lo largo del año y de por vida, porque de esta manera se mantendrá una buena salud”, reiteró la académica.
Expresó que de acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la inactividad física es el cuarto factor de riesgo de muerte a nivel mundial, por lo que es necesario concientizar a la gente para que el ejercicio se convierta en un hábito y compromiso en la vida de las personas.
Recordó que de acuerdo a recomendaciones de la OMS es importante tomar en cuenta la edad de las personas para realizar algún tipo de ejercicio, por ejemplo en niños y adolescentes de 5 a 17 años; la edad adulta que comprende de los 18 y hasta los 64 años de edad y los adultos mayores que va de los 65 años en adelante.
Dijo que en el caso de niños y adolescentes, se recomienda que hagan una hora de ejercicio o actividad aeróbica al día, que puede ser continua o fraccionada; en la escuela o en la casa. Con respecto a los adultos, se sugiere que realicen 150 minutos de ejercicio a la semana, es decir, ejercitarse media hora diaria con actividades de estiramiento y fortalecimiento de músculos y de los huesos.
Indicó que la gente puede caminar, trotar o incluso nadar, pero para que el ejercicio dé los resultados esperados, siempre es recomendable que la gente se acerque con un especialista para que le indique que tipo de actividades físicas pueden llevar adelante sin llegar a lesionarse.
Por último señaló que en el caso de los adultos mayores es importante que ellos hagan ejercicio en donde se fortalezca el sistema óseo y muscular, para tener movilidad y equilibrio y no sufran lesiones a nivel de músculo o hueso.