Un niño de 12 años, identificado como Yahshua Robinson, perdió la vida el pasado martes en la clase de educación física, lo obligaron a correr hasta la muerte, en la escuela Canyon Lake Middle School en Lake Elsinore, California, Estados Unidos.
La fatalidad ocurrió durante una clase de educación física, bajo condiciones climáticas extremas que alcanzaban los 90 grados Fahrenheit (32.2 grados centígrados). Según denuncias de la familia a la estación local de NBC News en Los Ángeles, el niño fue obligado a correr a pesar de no llevar la vestimenta adecuada para la actividad.
Amarna Plummer, tía del fallecido, reveló que Robinson comenzó a sentirse mal debido al calor sofocante y suplicó por agua antes de desmayarse. Testigos relataron que el niño se acercó al profesor explicando que no podía respirar. Sin embargo, lamentablemente, el desmayo fue inminente.
El personal de emergencia trasladó rápidamente al niño al Centro Médico de la Universidad de Loma Linda, donde fue declarado muerto a las 12:55 del mediodía, según informó la Oficina del Sheriff de Riverside en un comunicado oficial.
La familia se pregunta por qué se forzó al niño a correr en esas condiciones sin permitirle cambiar su ropa inadecuada.
La madre de Robinson es instructora de educación física en otra escuela del distrito y, según Plummer, advirtió previamente a los administradores escolares sobre el peligroso clima, aunque no se sabe a quién presentó sus preocupaciones.
El Distrito Escolar de Lake Elsinore emitió un comunicado expresando su pesar por la trágica pérdida y anunciando que consejeros de duelo brindarían apoyo tanto a estudiantes como al personal. Sin embargo, no hicieron comentarios sobre los detalles específicos del incidente.
La familia ha creado una página de GoFundMe para ayudar a sobrellevar esta dolorosa pérdida y reflexionar sobre la imprevisibilidad de la vida. Según la Agencia de Protección Medioambiental (EPA), los niños son especialmente susceptibles a enfermedades relacionadas con el calor debido a su menor relación entre masa corporal y superficie, lo que los pone en mayor riesgo de complicaciones por calor.
La EPA advierte sobre los signos de insolación, que incluyen piel enrojecida, respiración profunda, sudoración escasa o nula, mareos, fatiga, dolor de cabeza o pérdida de conciencia.
En caso de presentarse estos síntomas, se recomienda trasladar al niño a un ambiente fresco y buscar atención médica de inmediato.
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