Se llevó a cabo la entrega del Premio al Mérito Profesional, reconociendo a dos egresados, y se realizó el tradicional Liceo del Recuerdo.

Una gran fiesta donde predominó la amistad, recuerdos y anécdotas, fue la que se vivió durante el pasado Reencuentro de Exalumnos del Instituto Mexicano Madero, evento que se realiza cada año en las instalaciones del IMM Centro, y en el que participan decenas de egresados que durante 149 años de vida del instituto, han pasado por sus aulas.

La jornada inició muy temprano con un desayuno en el que se homenajeó a dos ex alumnos destacados, por su contribución a la sociedad y por poner en alto el nombre de la institución que los vio crecer y contribuyó en su formación como personas de bien.

En el Sector Gobernabilidad, fue Ana María Altagracia Flores Flores, de la Generación 110, quien recibió el Premio al Mérito Profesional del Instituto Mexicano Madero. Ana María Flores es licenciada en Derecho graduada con mención honorífica, se ha desempeñado como fiscal investigador y agente del Ministerio Público en la Fiscalía Metropolitana, jefa de departamento de Servicios escolares de la Dirección General de Centros de Reinserción Social del Estado, coordinadora de enlace institucional de la Subdirección Técnica de Centros de Reinserción Social; cuenta con diplomados y certificaciones como agente del Ministerio Público, investigación de delitos con recursos de procedencia ilícita, acreditaciones como servidora pública del servicio civil de carrera del gobierno del Estado de Puebla, cursos en materia de juicios orales, prevención del delito e impartición de justicia; entre otros cursos, talleres y diplomados.

Con respecto al Sector Sociedad y Religión, el condecorado en esta ocasión fue Jorge Antonio David Díaz, destacado basquetbolista nacido en el estado de Tabasco que inició su trayectoria deportiva en 1959 en el Instituto Mexicano Madero, en 1960 ingresa a la selección del IMM para jugar contra los distintos colegios de Puebla. En temporada de vacaciones regresaba a su natal Tabasco, y a la edad de 14 años es llamado a la selección de su pueblo para participar en el estatal, donde lo nominan como el novato del año; en 1961 vuelve a jugar en el estatal, quedando campeón del torneo. En 1962 ingresa a la selección del estado de Puebla, en 1963 estando en la selección se queda junto con su equipo en el tercer puesto; en 1964 por ser menor de edad, rechaza una invitación para participar en la preselección nacional rumbo a los Juegos Olímpicos de Tokio; posteriormente participa en el estatal de Tabasco quedando en segundo lugar. En 1970 ya como universitario queda campeón en la universidad de su estado. Dos canchas llevan su nombre, en 1999 es nombrado en Tabasco el mejor basquetbolista del Siglo XX, en 2015 inaugura un gimnasio al aire libre, el cual también lleva su nombre; a la par de esta trayectoria deportiva es contador público y catedrático de la Universidad Autónoma de Tabasco.

Al celebrar los logros de los galardonados, Job César Romero Reyes, Rector del Sistema Educativo Madero, señaló que el Premio al Mérito Profesional, es una forma de reconocer y fortalecer los valores e ideales del Instituto Mexicano Madero a través de la contribución trascendente y altruista de sus ex alumnos en la sociedad, pues es un premio que se otorga a ex alumnos que han recibido reconocimientos nacionales e internacionales, y que han dejado un legado en cualquier ámbito del país o incluso el mundo.

“Una institución educativa tiene que inculcar en los estudiantes habilidades para enfrentar la vida, pero también debe buscar la construcción de un mundo mejor, los maestros deben motivar, sembrar en los estudiantes ese deseo por querer ser diferentes; en esta ocasión nos satisface saber que ese mundo se puede lograr gracias al trabajo que nuestros premiados y demás ex alumnos hacen día con día. Enhorabuena para todos”.

En el evento también estuvieron presentes Donaciano Alvarado Hernández, vicerrector de Desarrollo Institucional del Sistema Educativo Madero, quien dirigió unas palabras para dar a conocer el proyecto del nuevo plantel Angelópolis que se está desarrollando; además de Pablo Tulio Silva Gómez, director general del IMM Centro.

Posterior a la premiación y luego de que los asistentes pudieron convivir, saludarse y recordar momentos de su estancia en la institución, decenas de Maderistas se congregaron en el Gimnasio Carlos Laguna para llevar a cabo el tradicional Liceo del Recuerdo Melchor Ocampo, en donde los ExaIMM presentaron números artísticos como canto, baile y rondalla, acompañados de sus familias y por supuesto de los amigos de la infancia y juventud que perduran hasta la actualidad.

Para finalizar, el comité organizador entregó al Rector de Sistema Educativo Madero, un reconocimiento por su labor al frente de una de las instituciones de mayor prestigio en Puebla, recordando a los asistentes que el próximo año se conmemoran los 150 años de vida del IMM con una serie de eventos que prometen ser de gran magnitud y trascendencia.