Expertos chinos en medicina tradicional china y occidental han compartido sus experiencias a través de videollamadas en el tratamiento de pacientes de COVID-19 con sus contrapartes de Italia, Estados Unidos, Bélgica, Japón y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

«La mejor experiencia de China consiste en admitir a todos los pacientes en el hospital», señaló el viernes por la noche Zhou Ning, cardiólogo del Hospital Tongji en la ciudad de Wuhan, epicentro de la epidemia, en la video llamada.

«Como COVID-19 es altamente contagiosa, poner a los pacientes con síntomas leves en cuarentena en casa es como propagar incendios en todas partes, lo que finalmente conducirá a la infección de toda una familia», advirtió el experto.

«Hacerlo también puede evitar que los pacientes con síntomas leves progresen a casos graves, lo cual reduce la tasa de mortalidad», agregó Zhou.

La opinión se hizo eco de Li Guangxi, director de la división pulmonar del Hospital Guang’anmen de Beijing, quien creía que los pacientes deben recibir tratamiento temprano.

«Necesitamos concentrarnos en la primera semana de la enfermedad. Es la ventana de oro para prevenir el desarrollo de la enfermedad de leve a grave», indicó el especialista.

COVID-19 tiene una alta tasa de mortalidad, destacó Jeffrey Shaman, profesor estadounidense de Ciencias de Salud Ambiental de la Universidad de Columbia.

«Tiene una cola gorda donde hay una parte de la población cuyos resultados son bastante severos», enfatizó el científico estadounidense.

Para el tratamiento de pacientes graves y críticos, Zhou detalló que la experiencia de Tongji es utilizar un sistema de ventilación para suministrar suficiente oxígeno, utilizar máquinas de oxigenación por membrana extracorpórea (ECMO, siglas en inglés) y frenar la tormenta inflamatoria de la enfermedad mediante la purificación de la sangre.

«Usamos esteroides en general. Es muy útil para los pacientes cuyo índice de oxigenación es muy bajo», analizó Zhou y añadió «pero no creo que el antibacteriano sea muy útil, especialmente en la etapa inicial, ya que COVID-19 es una enfermedad viral en lugar de una causada por bacterias».

Li también recomendó el uso de la medicina tradicional china. «Utilizamos diferentes hierbas chinas para los pacientes y se recuperan bastante bien», resumió.

Según la Administración Nacional de Medicina Tradicional China, alrededor del 96,37 por ciento de los pacientes de COVID-19 fuera de Hubei, la provincia más afectada, y el 91,05 por ciento en Hubei han recibido tratamiento de medicina tradicional china.

«Las pruebas de ácido nucleico, la unión de casos confirmados o personas que están expuestas a esos casos, y el aislamiento de todos se realizaron con mucho éxito en Wuhan. Esto es lo que hay que hacer», sostuvo en la video conferencia Margaret Harris, portavoz de la OMS sobre COVID-19.

«Estamos muy agradecidos por el gran trabajo que se ha realizado en China y otros países asiáticos, porque está demostrando que es posible detener este brote», afirmó Harris.

La parte continental de China reportó el sábado 46 nuevos casos confirmados de COVID-19, de los cuales 45 fueron casos importados del extranjero, de acuerdo con la Comisión Nacional de Salud.