Facebook continúa con su política de aceptar información falsa o errónea en sus propagandas políticas, un tema que causó gran revuelo en 2019 y del cual no ha rectificado, pues ahora en vez de cambiar las normas para publicar publicidad, hará que los usuarios decidan si desean verla o no.
A finales de septiembre de 2019, Facebook dejaba en claro en sus normas para publicar publicidad que ninguna de sus ads debía ser falsa o de contenido erróneo, a menos que se tratara de un político estadounidense.
Los anuncios o propaganda que los perfiles estadounidenses podían recibir bajo el contexto de las próximas elecciones en su país demostraron, bajo escrutinio, que en realidad no eran del todo verdaderos. Por ejemplo, alguna propaganda del actual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, podía afirmar el cierre de la frontera sur, aunque en ninguna de sus afirmaciones de campaña o en la Casa Blanca apuntaban a algo parecido.
Esta forma de llegar a los ciudadanos estadounidenses fue criticada debido a su falta de ética para poder publicitar información falsa; incluso la senadora demócrata Elizabeth Warrent declaró sobre el asunto, es una “gran preocupación acerca de nuestro proceso democrático” al “favorecer a un candidato intencionalmente”.
Sin embargo, a pesar de las fuertes críticas, Mark Zuckerberg no ha cambiado su decisión de permitir a los políticos publicar cualquier información que deseen, sea verdadera o no. En un discurso en la Universidad de Georgetown en octubre de 2019 dijo “No creo que una compañía privada tenga el derecho de censurar a los políticos” además de alegar a favor de los usuarios para decidir por sí mismos sobre algún político con la información obtenida.
Debido a esto, en vez de cambiar las normas para prohibir o restringir la información en los anuncios publicitarios de la red social, Facebook e Instagram en Estados Unidos le dará más control a los usuarios para decidir si quieren o no ver la propaganda política.
Asimismo, Facebook hará cambios en su Librería de Anuncios para ofrecer mejoras en la búsqueda y permitir saber, por ejemplo, cuántas personas intentaba alcanzar determinado anuncio. Estos cambios planean realizarse durante los primeros tres meses de 2020 o para el verano del mismo año.
Por otro lado, plataformas como Twitter o Spotify han tomado decisiones diferentes respecto a la propaganda política: la primera prohibió en su totalidad cualquier anuncio desde octubre, la segunda pausó la publicidad; incluso Google publicó restricciones para poder publicar algo sobre el tema.
Cabe esperar los cambios prometidos por Facebook, mientras tanto cada persona, principalmente los ciudadanos estadounidenses, se han formado una idea de los políticos que deciden publicar información falsa y de la red social por propaganda.