El calor en Rostov del Don, una ciudad en la qué hay más de 30 grados centígrados de temperatura, será un arma más de México a juicio del técnico surcoreano Shin Tae-yong.
«Hace mucho más calor y lo podemos sentir, incluso creo que hay una diferencia de unos 15 grados en comparación con nuestra anterior sede. Nuestros jugadores van a tener que acomodarse, a las seis ya hay un poco de brisa y viento y una vez que se pone el sol creo que los jugadores van a poder jugar», expresó el timonel en la conferencia de prensa previa al partido.
Rostov del Don es un horno y de entrada el timonel ya teme la merma física que puedan tener sus futbolistas.
«El factor determinante seguramente será el clima, tendrá una repercusión importante y en la Selección de México el clima juega a favor porque está habituada a temperaturas más elevadas.
«Celebraron amistosos en Estados Unidos y cuando el sol brillaba sobre el estadio, México jugaba muy bien. El cambio a estas temperaturas elevadas nos va a afectar más y en mi opinión México fue capaz de maximizar su fuerza sobre el campo, esta ha sido la clave de su éxito», expresó.
El timonel insiste en que sus futbolistas le dieron vuelta a la caída contra Suecia, misma que los obliga a ganar mañana en Rostov del Don si aspiran a seguir con vida en el Mundial.
«Hay que ser muy objetivos, es un equipo muy potente y fuerte, los hemos analizado y tenemos que garantizar que nuestros jugadores vayan más allá de su mejor potencial.
«El Mundial no termina en un partido y jugando bien el resultado puede darse. El primer partido ya ha pasado, nos hemos recuperado y hemos detectado fortalezas y debilidades de México. Tengo bastante experiencia y conocimiento de cómo ganar a un equipo de Latinoamérica», comentó el DT surcoreano.
Con información de Cancha / Reforma