La reivindicación de las mujeres como productoras y consumidoras de diseño abrirá el camino para la atención de nuevos paradigmas que atiendan necesidades e intereses específicos.
Continuando con la celebración del décimo aniversario de la Licenciatura en Diseño Industrial de la IBERO Puebla, las integrantes del Consejo Consultivo expusieron sus vivencias y reflexiones sobre cómo el feminismo y la paridad de género han interpelado a su profesión.
Taina Campos, fundadora del taller de cerámica Teorema, la perspectiva de género busca dar a conocer la visión femenina de las cosas, la cual está presente en todos los campos. “El género femenino siempre ha estado debajo de la pirámide donde el hombre está en la punta”. Se trata de un paradigma que busca visibilizar ésta y otras problemáticas relacionadas.
Usualmente se habla de diseñadores y usuarios, siempre hombres, lo cual invisibiliza la presencia de las mujeres. “Hablar de perspectiva de género es hablar de lo que implica ser mujer en muchas dimensiones”, comentó Sandra Molina, integrante fundadora de la Red Mexicana de Análisis de Ciclo de Vida, A. C. Puso el ejemplo de las carencias que tienen las aulas y talleres de diseño industrial para responder a las necesidades femeninas.
La irrupción de las mujeres en mundos configurados por y para hombres también es una barrera para el desarrollo profesional de ellas. Aunque hay excepciones, Luisa Osorio, egresada de la Licenciatura en Diseño Industrial de la IBERO Puebla, reconoció que los roles de hombres y mujeres son igual de trascendentes para la operación de los proyectos en los que colabora.
Insertarse en el campo de la construcción es problemático para las mujeres jóvenes recién egresadas. Fue el caso de Érika Cortés, catedrática de la UNAM, quien experimentó múltiples obstáculos por su género al egresar de la carrera de Arquitectura. “En las universidades no nos preparan para estas cosas. Hay un desequilibrio en cómo nos tratan”.
Originaria de Polonia, Sylwia Ulicka, fundadora de la consultoría Sector11.mx, indicó que ha habido progresos en la paridad de género, lo cual se observa en las nuevas generaciones de estudiantes de Diseño Industrial. Señaló que la terminología construye el mundo en el que vivimos, por lo que los conceptos de “diseñador” y “usuario” tendrían que repensarse.
Como observó Taina Campos, la presencia predominantemente femenina en algunos ámbitos profesionales y de activismo puede reforzar la miopía en torno a los problemas del mundo real. Por eso, Sandra Molina exhortó a construir espacios desde la docencia en donde todas las personas puedan sentirse incluidas y seguras.
Del mismo modo, la identificación con lo femenino es una postura política en torno a la identidad propia y a la relación entre mujeres y hombres. “La narrativa del patriarcado está muy introyectada. Muchas mujeres actuamos de forma masculina sin saberlo porque el propio sistema te lo pide para sobrevivir”, reflexionó Kitzia Barrera, integrante del colectivo de cerámica 1050°.
__________________________________________________________________________________________________
“Tenemos que preguntarnos cómo ejercemos estas líneas de poder desde la educación. Debemos mostrar, con el ejemplo, los valores de equidad e inclusión”: Sandra Molina.
__________________________________________________________________________________________________
Las expertas coincidieron en que el diseño habla de la historia de la persona que lo crea, por lo que debe repensarse esta actividad en términos de la identidad de cada individuo por encima de los roles de género y la percepción de la feminidad en el proceso de diseño.
El futuro se presenta como una noticia esperanzadora para las integrantes del Consejo Consultivo. Érika Cortés celebró que los estudiantes sean ahora más receptivos a nuevos cuestionamientos con respecto a los diferentes saberes. “Estamos viviendo un momento sin precedentes en la participación y reconocimiento de las mujeres en el diseño”, complementó Kitzia Barrera.
Al compartir sus experiencias de violencia, el panel reconoció que, desde niñas, el patriarcado está presente en múltiples modalidades. Por ello, celebraron que el feminismo abra espacios de discusión y desnormalización de prácticas históricas. “Esta visión nos va a ayudar a hacer diseños colaborativos y transdisciplinarios”.
Firma de actas
Los consejos consultivos en la IBERO Puebla son órganos colegiados que buscan sugerir los medios que permitan garantizar la calidad académica y pertinencia social de los programas académicos. “Las recomendaciones que hoy han hecho hablan de un programa que se reinventa y propicia la formación integral e incentiva a construir un mundo más justo e incluyente”, expresó la Dra. Lilia Vélez Iglesias, directora general Académica.
En complemento, el Mtro. Xavier Recio Oviedo, director del Departamento de Arte, Diseño y Arquitectura, agradeció la participación de todos los integrantes de la Licenciatura en Diseño Industrial, quienes realizaron múltiples aportaciones al eventual rediseño del programa académico. “Estamos entusiasmados por el desafío que representa caminar hacia esa utopía realizable”.
La Licenciatura en Diseño Industrial de la IBERO Puebla llevó a cabo una serie de actividades interactivas con su comunidad de académicos, estudiantes y egresados para revivir experiencias de una década y encaminar la renovación y revitalización de la misión educativa con base en las nuevas necesidades sociales y laborales.