Los futbolistas de Primera y Segunda División del futbol español consideran, en relación con la crisis sanitaria por el coronavirus, que la primera preocupación y exigencia es la salud y que la competición no debe reanudarse hasta que las autoridades sanitarias lo autoricen.
En un comunicado difundido por la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), tras las reuniones mantenidas con capitanes y representantes de las primeras plantillas de los clubes de Primera y Segunda División, los jugadores reiteran que el calendario de competición queda supeditado a las decisiones de las autoridades sanitarias y que todo queda condicionado a la salud individual y a la protección de la salud pública, la de todos los ciudadanos y ciudadanas de este país.
«La vuelta a la competición, que supone la vuelta a los terrenos de juego y a nuestros vestuarios requerirá de un protocolo que determine la existencia de un coordinador de prevención de riesgos y especialista en pandemias, que garantice la seguridad sanitaria a todos los operadores que actúan en el ámbito del futbol».
Con relación a los ERTES, los futbolistas consideran extraño que desde LaLiga apoye los mismos, teniendo en cuenta que el control económico, y la bien saneada economía predicada desde la patronal, en relación a los clubes, no ha supuesto un colchón para una situación temporal de dos meses, siendo conscientes de que la competición ha sido suspendida y no cancelada.
«Y teniendo en cuenta que los propios clubes y los jugadores individualmente están llegando a acuerdos en lo que se refiere a los salarios. Lo que no vamos a hacer los futbolistas es que se dejen de garantizar nuestros derechos laborales», se mencionó.
Por último, dejan claro que la vuelta a la competición no debe hacerse sin una decisión expresa de las autoridades, pues no se trata del futbolista, sino de todo su entorno. Y en este sentido, si tenemos que llevar a cabo una iniciativa en el Congreso de los Diputados, lo haremos. La salud debe ser cosa de todos.