Según informó la Policía Estatal de Oregón el jueves, un hombre recién trasladado al hospital psiquiátrico de Oregón logró escapar mientras estaba completamente esposado y huyó conduciendo una camioneta robada.

Christopher Pray, quien previamente había enfrentado cargos por intento de asesinato y otros delitos, fue visto por última vez conduciendo hacia el sur por la Interestatal 5, reportó la Policía Estatal de Oregón en Facebook, calificándolo como un «fugitivo peligroso».

Durante la fuga, un empleado del Hospital Estatal de Oregón resultó herido, confirmó la portavoz Amber Shoebridge.

La Policía Estatal informó que recibieron la notificación de la fuga el miércoles por la noche. Pray, a pesar de estar «totalmente restringido con esposas en las piernas, una cadena en el abdomen, esposas en las manos y un dispositivo que conecta todo junto», logró «eludir a las fuerzas del orden mientras se dirigía hacia el sur por la Interestatal 5», aunque no especificaron cómo lo hizo.

Pray enfrentaba una serie de cargos, incluyendo intento de asesinato, robo, agresión y posesión ilegal de un arma de fuego en el Tribunal de Circuito del Condado de Multnomah, donde se encuentra la ciudad de Portland. Sin embargo, el miércoles fue trasladado al Hospital Estatal de Oregón en Salem después de que se determinara que no estaba en condiciones de enfrentar un juicio, según registros judiciales.

Shoebridge explicó en un comunicado por correo electrónico que Pray tuvo «un altercado con otro paciente» poco después de su admisión y necesitó ser llevado para recibir tratamiento. Cuando fue devuelto al Hospital Estatal de Oregón esa noche en una camioneta sin marcar del hospital, Pray «logró tomar el control de la camioneta y escapar».

Puedo confirmar que un miembro del personal resultó herido. No puedo proporcionar más detalles al respecto», dijo Shoebridge.

Alertan al público
Pray, vestido con una camiseta blanca, pantalones deportivos granate y zapatillas de goma negras, es considerado extremadamente peligroso según las autoridades policiales, quienes instaron al público a llamar al 911 y reportar cualquier avistamiento suyo o de la camioneta Dodge Caravan blanca de 2016 que conducía.»

El Imparcial