Hombres armados atacaron el sábado un centro de formación de matronas en la ciudad de Jalalabad, al este de Afganistán, y mataron a tres miembros del personal del recinto tras luchar durante varias horas contra las fuerzas de seguridad.

Uno de los atacantes murió al principio de la operación después de detonar una bomba suicida, pero un segundo resistió durante varias horas antes de morir, dijo el portavoz del gobierno provincial, Attaullah Khogyani.

Un chofer y dos guardias de seguridad murieron y siete personas resultaron heridas, pero otras 63 personas, casi todas mujeres, fueron rescatadas ilesas del complejo, que albergaba una escuela de parteras y una residencia para estudiantes.

Durante la mayor parte del día se escucharon tiroteos y explosiones esporádicas en el lugar, donde era posible ver grandes nubes de humo negro.

Hasta ahora ningún grupo se ha adjudicado la responsabilidad del hecho, pero Estado Islámico ha reivindicado una serie de ataques recientes en el país.

Reuters