La Administración Nacional de la Aeronáutica y del Espacio (NASA, por sus siglas en inglés), mostró imágenes de la nebulosa planetaria NGC 3918, ubicada en la constelación de Centauro.
La fotografía de la nube brillante de gas de colores fue tomada por el Telescopio Espacial Hubble de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA por sus siglas en inglés), donde se observa los restos moribundos de un gigante rojo.
La agencia espacial estadunidense explica que durante la fase final en la evolución de estos astros, una gran cantidad de nubes de gas son expulsadas de la superficie de la estrella antes de que emerja de su capullo como una enana blanca.
La intensa radiación ultravioleta de la estrella remanente hace que el gas próximo brille. Estas coloridas nebulosas de formas irregulares, son un misterio para los científicos.
Una característica de la nebulosa NGC 3918 son los «ojos», con un caparazón interior de gas brillante y una capa externa más difusa que se extiende, resultado de dos eyecciones separadas de gas.
De acuerdo con los estándares, los científicos estiman que las nebulosas planetarias como NGC 3918 tienen una vida corta, con una vida útil de unas pocas decenas de miles de años.